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Gamarra conversó con ABC este viernes y dijo que las empresas del sector privado están presentando solicitudes periódicas a su dirección para poder importar atracurio, una droga que no se produce en Paraguay. La cantidad semanal de ingreso de esta droga es de 20.000 a 30.000 dosis por semana por parte de las empresas privadas e informó que el Ministerio de Salud las está comprando todas por más de que el precio sea elevado por la alta demanda.
El atracurio y el midazolam son dos drogas vitales para asistir a pacientes con coronavirus que estén con un respirador. El primero es un relajante muscular y el segundo, un sedante. Ambos actúan en conjunto para que los pulmones puedan funcionar al estar intubado.
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Sobre la existencia de estos productos, Gamarra dijo que hicieron los controles en las farmacias que están cerca de los hospitales de referencia COVID y no encontraron en stock. En relación a las dosis que entran de contrabando o las que se venden de forma ilegal y son robadas del Ministerio de Salud o de IPS, detalló que no las encontraron y que probablemente tampoco lo harán a no ser que tengan una orden de allanamiento en un trabajo conjunto que debería hacerse con Fiscalía.
Los familiares de los pacientes de los internados con COVID denunciaron esta semana que solo pueden acceder a los medicamentos a través del contrabando. Básicamente lo que hacen es comprar de Clorinda y, a partir de allí, existe una cadena que permite el ingreso de las drogas al país.
En el caso de los familiares de pacientes del Ineram contaron que el precio promedio del atracurio en las farmacias locales es de G. 90.000 por ampolla y cada internado necesita hasta 20 por día. En Clorinda cuesta alrededor de G. 10.000 por ampolla, pero el monto sube porque las coimas que se deben pagar.
“Toda esta semana estuvimos haciendo los controles en las farmacias aledañas justamente por estas denuncias. Lo que vimos es que en las farmacias no tenían stock y si tienen no van a mostrar. No podemos entrar a ver el stock”, lamentó. Gamarra habló de personas que serían como “gestores” que venden las drogas de forma ilegal y las guardan en mochilas. “Solo con Fiscalía podríamos ordenar abrir las mochilas, bolsos. Son como delivery, pero a pie”, explicó.
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La directora advirtió sobre los riesgos que puede tener el usar estas drogas si es que no se conservan bien, especialmente el atracurio, que debe conservar una cadena de frío de entre 2 y 8°C. El midazolam puede “aguantar” hasta 30°C, dijo.
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Sobre el comercio ilegal, expresó que la única herramienta que tienen ellos en la dirección y deben pedir los familiares de los pacientes es la factura de compra. “La factura es el único documento que nos sirve para saber a cuánto se vendió”, sostuvo.
En relación a la expedición de facturas, Gamarra señaló que tienen un sistema de control cruzado con Senad, ya que estos medicamentos son controlados, pero reconoció que la verificación de las dosis en un cotejo entre existencias dentro de los hospitales y la coincidencia con la expedición de recetas es casi imposible. “Con los medicamentos controlados como psicotrópicos y estupefacientes se tiene control cruzado con la Senad. De los demás medicamentos, hay control con farmacias, a solicitud de Dinavisa, se pueden ver recetas”, manifestó.
Por último, dijo que en la reunión que mantuvieron con varios empresarios del sector farmacéutico se acordó facilitar los trámites para la importación no solo de las vacunas, sino también de estas drogas esenciales.