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El escrito presentado por el abogado Jorge Bogarín señala que el hermano del exsenador colorado Óscar González Daher “ha padecido covid-19, estando internado en grave estado en terapia intensiva por 12 días (intubado) según lo expresa su médico de cabecera, Dr. Carmelo González Doldán, en el certificado médico visado que se adjunta”.
La defensa añadió que, según el galeno, RGD no se encuentra en condiciones físicas ni psíquicas para afrontar la audiencia preliminar, debido a su grave estado de convalecencia posenfermedad, otorgando un reposo médico de 30 días para su recuperación.
En cuando a González Karjallo, también solicitó el aplazamiento de la diligencia, teniendo en cuenta que las conductas atribuidas por el Ministerio Público al acusado están ligadas estrechamente con las de su padre, por lo que la separación de la preliminar afectaría el ejercicio del derecho a la defensa y desdibujaría la teoría del caso trazado por el abogado que los asiste.
Atendiendo el pedido de la defensa, el juez de garantías especializado en Delitos Económicos, Humberto Otazú, dispuso que un médico forensa del Poder Judicial se constituya en el domicilio de RGD para constatar su estado de salud. Una vez que tenga el informe médico, el magistrado resolverá si posterga la audiencia preliminar.
El 22 de enero pasado el fiscal de la Unidad de Delitos Económicos y Anticorrupción Osmar Legal acusó y solicitó juicio oral por usura y lavado de dinero para Ramón González Daher y por lavado de dinero a su hijo Fernando González Karjallo. El agente pidió además el comiso especial de bienes a ambos acusados por G. 58.493.632.102.
Según el Ministerio Público, esa cifra es la que el expresidente de la Asociación Paraguaya de Fútbol y su hijo lograron ingresar al sistema financiero entre los años 2010 y 2019 haciendo suponer, tanto a las entidades públicas como privadas, que era producto de lo percibido por el cobro de alquileres y compra y venta de inmuebles, cuando que en realidad lo consiguieron a través de la usura.