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Con la misma actitud prepotente que se observa en el video en el que filmó a médicos y enfermeras que acudieron al Hospital Materno Infantil de Trinidad a aplicarse la vacuna antiCOVID, pues en este nosocomio les correspondía según les estableció el Ministerio de Salud en su agendamiento, habló la médica María del Carmen Elizeche con ABC Cardinal.
Sostuvo que no se disculparía con los trabajadores a los que atacó verbalmente, pues -según ella- solo les había hecho preguntas.
En el Ineram se sintieron agraviados
Sin embargo, desde el Ineram incluso emitieron un comunicado en el que expresaron su indignación por ser discriminados por una funcionaria molesta. Además, expresaron su solidaridad con los médicos y enfermeros que tuvieron que sufrir “el triste espectáculo”, siendo que son trabajadores de primera línea y acudieron a inmunizarse como se había establecido que les correspondía.
Pero la funcionaria insiste en que ella también se infectó de COVID -19 trabajando en ese hospital en setiembre de 2020 y que también recibe a una gran cantidad de gente. Según una fuente de ABC, Elizeche es cirujana plástica del Hospital de Trinidad. En el video, la funcionaria les dice a los trabajadores que aguardan la vacuna que son “privilegiados” y que, por causa de ellos, ella no recibirá la vacuna.
Denunció manejo de seccionaleros
La médica denunció que en la aplicación de las vacunas “hay política de por medio” y, según dijo, el hospital “está manejado por dos seccionaleros”.
Se defendió diciendo que en ningún momento habló sobre quiénes serían los privilegiados a ser vacunados, pero comentó que coincidentemente ahora en el hospital aparece “gente nueva que no sabemos de dónde viene”.
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“No le maltraté a nadie. Hay un trasfondo. No hay vacunas y no hay fechas. Me informaron de que ya no hay”, insistió Elizeche.
Una funcionaria del Hospital Materno Infantil de Santísima Trinidad (HMIST) grabó un vídeo en el que se puede ver que reclama a funcionarios de salud -de otras dependencias- por qué no acuden a sus lugares de trabajo para inmunizarse contra el COVID-19. Este local sanitario fue designado como uno de los centros de vacunación y su personal de blanco está molesto debido a que no fue incluido en la primera línea para la aplicación de las 4.000 dosis adquiridas recientemente.
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Entre los funcionarios que fueron “atacados” se encuentran médicos y enfermeros que trabajan en las terapias del Instituto de Previsión Social (IPS) y del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente (Ineram).
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Tras el hecho, la cartera de Salud reiteró que los vacunatorios dispuestos para esta primera etapa de inmunización están instalados para que el personal de salud de ese nosocomio, así como de otros hospitales, puedan acudir de acuerdo a su agendamiento.