Gente satura Identificaciones pese al covid

En las últimas semanas, el Departamento de Identificaciones se vio atestado de una larga fila de gente proveniente de varios puntos de la capital y ciudades vecinas para tramitar sus documentos personales. Las autoridades explicaron que este tipo de aglomeración es normal en esta temporada, pero debido a la pandemia de covid-19 tuvieron que adecuarse al protocolo sanitario y fraccionar la atención al público mediante la modalidad par-impar.

La larga fila de gente   es una constante en la avenida Boggiani.
La larga fila de gente es una constante en la avenida Boggiani.

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Tanto dentro como fuera del edificio se observa un constante movimiento de gente. Mientras en el interior se permite el acceso de un cupo limitado de personas, en el exterior aguarda una extensa fila en la vereda de la avenida Boggiani.

Como una forma de adecuarse a las medidas sanitarias, el Departamento de Identificaciones implementó la modalidad par-impar para evitar la masiva afluencia de gente en el edificio.

Se dispuso que aquellos cuyos documentos terminan en número impar serán atendidos los días lunes, miércoles y viernes, mientras que aquellos que lo tienen en número pares lo harán los martes, jueves y sábados.

No obstante, los solicitantes no están conformes y se quejan principalmente del padecimiento que tienen que aguantar mientras aguardan el momento de ingresar al salón de Identificaciones.

“Desde las 07:30 de la mañana estamos formando fila. Son tres horas por una cédula. Hay mucha gente acá y no se respeta la regla de distanciamiento. Prácticamente mediodía se pierde y no hay una persona responsable que diga si no se atiende a aquellos cuyos documentos terminan en número par o impar”, aseveró Maximiliano Pereira.

“De Capiatá estoy viniendo. Primeramente fui a la oficina de Identificaciones en San Lorenzo, a las 06:30 y me dijeron que ya no tenían número para atenderme para renovación de cédula y tuve que venir acá. ¡Es una vergüenza que nos traten así!” se quejó por su parte María Elena Cabral, mientras formaba la fila.

“No es extraño”

El subcomisario Julián Giménez, asesor jurídico del Departamento de Identificaciones, explicó que el movimiento de gente “no es extraño”, al indicar que en los meses de verano hay una altísima demanda para la expedición de cédulas y pasaportes.

“No es extraño eso para nosotros. A esta altura del año solemos tener 2.500 a 3.000 personas en el salón, pero como hoy estamos trabajando en la modalidad par e impar por la pandemia, hace que haya poca gente en el salón”, explicó Giménez.

“Lo que no podemos permitir es que entren todos juntos. Por eso, abrimos las puertas las 05:30 para que puedan sacar su número, puedan sentarse y a partir de allí comienza la atención. Para el mediodía o 13:00 horas ya no tenemos gente en el salón”, aclaró.

El jefe policial también destacó que hay prioridad en la atención para personas con niños en brazos, embarazadas, adultos mayores o personas con alguna discapacidad física.

Aclaró que no se descuidan las medidas del protocolo sanitario, como el uso de tapabocas, lavado constante de manos y el distanciamiento. Finalmente, descartó la falta de insumos para satisfacer la alta demanda de documentaciones.

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