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Una cantidad de personas denunció a través de las redes sociales estar recibiendo llamados telefónicos desde Ucrania, según se deduce por el prefijo +380, lo que sería un intento de estafa muy común y que reflota cada cierto tiempo. La única forma de evitarlo es no atender y tampoco devolver el llamado.
Según comentó el comisario Diosnel Alarcón, jefe del Departamento Especializado Contra el Cibercrimen y la Investigación de los Hechos Punibles Informáticos de la Policía Nacional, el método de estafa conocido como Wangiri consiste en hacer que la persona responda al llamado para luego facturarle los minutos.
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Comentó que normalmente se hace implementando máquinas que llaman masivamente a números aleatorios, y la facturación depende de la cantidad de tiempo que duran las llamadas atendidas o respondidas. Este mismo esquema ya había sido utilizado a mediados en noviembre del 2019, pero variando los países de origen de las llamadas, siendo pudiendo ser entonces Cuba, Guinea Ecuatorial y otros países.