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ENCARNACIÓN (Juan Augusto Roa, de nuestra redacción regional). La tala de árboles y la venta de rollos en forma ilegal es una práctica muy extendida en comunidades que están instaladas en los alrededores de la reserva forestal San Rafael, en la zona norte del departamento de Itapúa, en el límite con el departamento de Caazapá.
Durante un recorrido por la localidad de Santa Librada, distrito de Alto Verá, se pudo constatar la existencia de gran cantidad de carbón elaborado con árboles extraídos de los bosques circundantes, ofertados a la vera del camino, a la vista de todo el que pase por el lugar.
Un funcionario del Instituto Forestal Nacional (Infona), Siles Rivas, confirmó que en el departamento de Itapúa existe un solo horno habilitado para la producción de carbón vegetal utilizando como materia prima residuos de aserradero, en la localidad de Karonay, distrito de Alto Verá.
La producción de carbón, sin embargo, es una práctica extendida en toda la zona donde existen recursos forestales, incluso en la zona de amortiguamiento de dicha reserva natural. Se puede observar a plena luz del día en los distritos de San Pedro del Paraná, Alto Verá, Itapúa Poty y en Edelira 70, en el noreste de Itapúa, cómo los campesinos tumban árboles del bosque nativo para convertirlos en carbón vegetal.
Prometen verificación
El jefe regional del Infona, ingeniero forestal Darío Giménez, expresó que técnicos del ente estatal verificarán el origen de esa gran cantidad de carbón, para la intervención en caso de que sea necesario hacerla. “Como Infona cuando vemos cierta cantidad de subproducto intervenimos y tratamos de averiguar de dónde se sustraen las leñas para el carbón y se abre un sumario a los propietarios, en el cual se registra el desmonte que posteriormente se convierte en carbón”, explicó el técnico.
Añadió que cuando se observan esos hechos el primero en actuar debe ser la Policía de la zona, y comunicar al Ministerio Público, así como al Infona o al Ministerio del Ambiente y Desarrollo sustentable (Mades). La unidad especializada en medio ambiente debe actuar de oficio ante este tipo de situaciones, manifestó.
Explicó que el Infona, al ser un ente administrativo y fiscalizador, interviene los lugares de comercialización y busca determinar de dónde procede el producto, que puede ser un desmonte, y se abre un sumario a los dueños y a los que transportan y comercializan el subproducto.
Añadió que desde el Infona se alienta a la reforestación y enriquecimiento del bosque con especies de rápido crecimiento en lugares sin cobertura, y así poder tener para aprovechar y mitigar el uso de especies nativas.
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