Médico señala que hospitales siguen llenos y remarca que solo hubo un cambio de estrategia

El titular de la Sociedad Paraguaya de Neumología y médico del Ineram, José Fusillo, indicó que no se puede hablar de un descenso de casos, que siguen siendo muchos, sino de una desaceleración de contagios. Agregó que los hospitales siguen llenos desde hace una semana y opinó que el anuncio de la eliminación de fases fue más bien un cambio de estrategia. No obstante, reiteró que puede ser peligroso que la ciudadanía relaje las medidas sanitarias.

Unidad de Terapia Intensiva (UTI) del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente Juan Max Boettner (Ineram), donde están internados pacientes con covid-19 (coronavirus).
Unidad de Terapia Intensiva (UTI) del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente Juan Max Boettner (Ineram), donde están internados pacientes con covid-19 (coronavirus).Marta Escurra

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Esta mañana habló en comunicación con ABC el doctor José Fusillo, quien trabaja de cerca con casos de COVID-19, respecto a lo ocurrido con el anuncio de la eliminación de fases de la cuarentena inteligente –el último fin de semana– en el marco de la pandemia por coronavirus. Aseguró que cuando el Ministerio de Salud decidió sacar la modalidad de fases, en realidad se trató de una modificación en las restricciones sanitarias en todo el territorio nacional.

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“Hubo errores en la comunicación, se usaron palabras como descenso de los casos. Nosotros no estamos en una etapa de descenso de casos, estamos en una desaceleración, pero no descenso. Cuando se habló de terminar la cuarentena, la gente pensó que había fin a las restricciones. Estamos en una meseta alta, en eso hay que ser bien claros, lo que se está tratando de hacer con el cambio es admitir que esta estrategia de fases no estaba funcionando”, expresó.

“Nosotros vemos todos los días los hospitales llenos, es lo que está pasando, estamos con el hospital lleno hace una semana (...) Hay pocas variaciones en cuanto a cantidad de camas”, acotó al hacer referencia al elevado número de nuevos casos y fallecimientos que se siguen registrando.

En ese contexto, consideró que las decisiones que están siendo tomadas son más bien desde el punto de vista económico y no sanitario. También apuntó a que muchas de las restricciones ya estaban antes de la cuarentena social, y en este caso lo que se hizo fue habilitar algunos rubros más en el sector económico. “Acá hay que entender que lo que cambia un poco es el tema de eventos. En realidad hay un grupo más de personas que van a poder trabajar. Ahora se van a blanquear las reuniones sociales”, remarcó.

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Con preocupación declaró que si la gente no aplica las medidas sanitarias, puede ser peligroso. "Si no nos cuidamos, los casos van a aumentar (...) Mucha gente toma la información como mejor le parece.

Añadió que incluso hay pacientes que van a los hospitales y se enojan al no encontrar cupos para internarse porque opina que la comunicación está siento errónea para que la ciudadanía entienda lo que realmente está pasando. “Hay una incoherencia entre lo que está ocurriendo y las medidas que se toman, hay un cambio de estrategia, no se eliminaron las restricciones”, insistió.

En cuanto a las reuniones sociales, expresó que a la fecha los doctores saben que los contagios se producen en lugares cerrados donde hay un gran número de personas. “Si se van a reunir en lugares cerrados, todos tienen que tener tapabocas”, resaltó.

Recordó que los factores de mayor riesgo al contraer el nuevo coronavirus son la hipertensión, la diabetes, la obesidad y las enfermedades respiratorias crónicas. “Hemos visto pacientes jóvenes vapeadores con internaciones”, acotó, pero alegó que los casos no son suficientes como para hablar de una tendencia, que sí se dio en Estados Unidos.

Mortalidad en UTI se redujo

Asimismo, el doctor Fusillo reconoció que con el tiempo se mejoró mucho en la aplicación de los tratamientos en la Unidad de Terapia Intensiva. “Hay que darle su lugar al tiempo, de patear un poco la curva, nos ayudó a aprender (...) Nosotros hemos reducido la mortalidad en terapia del 100% prácticamente que teníamos al principio a un 35%, 40% aproximadamente”, comentó.

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