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El Ministerio de Hacienda debe al Cuerpo de Bomberos Voluntarios del Paraguay lo correspondiente a los años 2019 y 2020. Este año la organización no ha recibido ni un solo porcentaje de la deuda y considerando la crítica situación que se vive en el país, por la gran cantidad de incendios registrados, le urge conseguir fondos para seguir luchando contra el fuego.
El capitán Valdez destacó esta mañana que se generó un problema porque el Ministerio de Hacienda rechazó recientemente unas facturas del año pasado y además porque debido a la pandemia los trámites burocráticos son peores. Cuestionó que las dificultades se generen incluso dentro de departamentos del mismo ministerio.
Contó que tras varios pedidos consiguieron reunirse con el presidente Mario Abdo Benítez, quien ordenó a Hacienda que el problema sea subsanado y los bomberos aceptaron recibir unos G. 4.000 millones como adelanto. El Ejecutivo ya emitió un decreto dando la orden y tras la presentación de un documento pendiente esperan poder cobrar los fondos esta semana.
Sobre cómo sobrevivieron hasta la fecha, destacó que fue gracias al aporte ciudadano, con las colectas que se hacen en los semáforos y las donaciones independientes de todo tipo de víveres e insumos.
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Al respecto, el Ministerio de Hacienda emitió un comunicado en el cual señalan lo mismo que el Capitán Valdez, con lo relacionado al rechazo de las facturas. También desde la institución aseguran que “se han agotado todos los mecanismos posibles para viabilizar la transferencia de G. 4.808.938.819, que corresponde al 80% de los fondos aprobados por Ley. Sin embargo, hasta el momento no pudo materializarse debido a la falta de presentación del Certificado de Cumplimiento Tributario Vigente por parte del CBVP, requisito obligatorio para dar trámite a los aportes que benefician a las ONG”.
Negro panorama
Por otra parte, el capitán Valdez señaló esta mañana que las condiciones severas por sequías y temperaturas elevadas son muy poco alentadoras para el CBVP. “Son ideales para incendios forestales, temperaturas superiores a los 30°C y vientos fuertes”, consideró.
“No hay una esperanza muy grande. En ocho días no vamos a tener precipitaciones, en 15 días más o menos habría algunas lluvias pero nos estamos preparando para una (ardua) tarea en noviembre/diciembre”, agregó.
Asimismo, destacó que depende de la ciudadanía evitar que estos incendios se sigan registrando, puesto que aunque existen los que son generados directamente de manera incidental, la mayoría son accidentales provocados por la acción del hombre.
Como ejemplo más resaltante mencionó el hecho de arrojar una botella de vidrio por la ventanilla del auto durante un viaje. Al caer en la pastura seca y tras pasar varias horas bajo el sol, a temperaturas muy elevadas, se genera un efecto lupa que produce pequeñas chispas que se convierten luego en grandes incendios debido a la sequía.
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También mencionó las fogatas no apagadas por completo, la quema de basuras sin tener en cuenta las condiciones del viento y la zona con elementos inflamables y la quema de pasturas para renovar los campos.
Hasta anoche, se registraban 5269 focos de calor en todo el territorio nacional, de acuerdo al Reporte de focos de calor sobre la República del Paraguay. La mayor cantidad de puntos se ve en Presidente Hayes, Canindeyú, Caazapá, Paraguarí, Itapúa y Alto Paraguay.