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Los pagos se empezaron a acreditar el jueves por grupos y se pretende alcanzar a más de 40.000 beneficiarios, informó el gerente de Prestaciones Económicas del IPS, Pedro Halley. La Previsional pide a los trabajadores suspendidos no aglomerarse frente a los bancos para ver si ya está disponible el cobro, sino esperar que les llegue el mensaje de confirmación vía celular, puesto que también dependen de la organización de las sucursales bancarias.
“Ayer ya iniciamos las acreditaciones vía bancaria a los trabajadores que cobran por tarjeta de débito sus salarios. Y transferimos ya unos 16.500 pagos (...) Y hoy remitimos ya a BNF 1.537 nombres, que son los que cobran en efectivo en sus respectivas empresas. Ya arrancamos con todo (...) Pensamos llegar a 40.000 acreditaciones más o menos”, indicó.
El quinto pago que hace IPS representaría unos US$ 7 millones, pero se aclara que es el primer, segundo o tercer pago para los empleados cesados, ya que el periodo máximo de suspensión es de 90 días. Los desembolsos por compensación económica desde mayo hasta hoy alcanzan los US$ 51 millones de mayo y se espera llegar a pagar compensaciones económicas hasta el mes de diciembre con una proyección total de US$ 85 millones, detalló Halley.
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En esta emergencia sanitaria y económica, el Gobierno transfirió US$ 100 millones como parte del pago de la deuda que mantiene el Estado con el IPS, pero condicionado a utilizar los fondos a la ayuda económica para los trabajadores cesados a consecuencia de la cuarentena por el COVID-19 y a los reposos y aislamientos preventivos de los asegurados, siempre relacionados al nuevo coronavirus. Se estima que incluso habría un remanente de US$ 15 millones.
El subsidio por suspensión y por vulnerabilidad es de G. 1.096.419 por mes (50% del salario mínimo), prorrateado al tiempo de cesación, reposo o aislamiento. Los principales medios de pagos son por red bancaria con acreditación en cuenta y a través de las ventanillas del Banco Nacional de Fomento (BNF).