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“En la primera Ley de Emergencia, unas 26 veces estuvimos nombrando a las Mipymes, pero de todas esas veces que nombramos en términos de ejecución no hemos llegado ni siquiera al 30% de esa Ley de Emergencia, entonces realmente en este momento la decepción es muy grande y la ansiedad está creciendo”, indicó Gustavo Giménez, vicepresidente de la Asociación de Empresas Paraguayas Proveedoras para Eventos, uno de los sectores afectados por el veto del Ejecutivo a la ley de auxilio a los grupos económicos anteriormente citados.
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Respecto al veto, Giménez remarcó que “desanima bastante porque hace rato venimos en interminables discusiones sin ningún tipo de resultado, y por el otro lado tenemos un montón de promesas con relación a que íbamos a encontrar algún tipo de soluciones y está era una muestra de lo que pretendíamos lograr en alguna que otra cuestiones importantes, porque como te digo, no era la solución a todo pero iba a aminorar un poco el peso que estamos llevando solo nosotros”.
Hizo énfasis en que estos sectores son de los que han recibido casi nula ayuda, pese a estar parados desde la primera hora. La ayuda “no había llegado y no llegó a tiempo ni en la proporción que se necesita. Imaginate de la cantidad de Mypimes que están activas, digamos solamente se otorgó un porcentaje ínfimo en relación a los créditos, no llegamos ni siquiera a la meta que nos habíamos propuesto como gremio en las federaciones que eran por lo menos 100.000 créditos”, dijo y agregó que las pocas empresas que lograron créditos, ahora de vuelta están en cero al no poder producir.
Insistió que como ven las cosas, tiene la impresión que el Ejecutivo considera que el reclamo del sector se enfrió, por lo que deciden simplemente ignorarlo. “Esto nos demuestra un poco que como ya se enfrió el tema de las Mypimes, las dejamos de lado y que se arreglen como puedan por porque ya se enfrió el asunto, entonces nos apena muchísimo”, dijo analizando la percepción que tiene sobre la postura del Ejecutivo.
El veto parcial a la Ley que retornó al Congreso sobre todo se opone a otorgar flexibilidades en el pago de servicios con luz y agua, uno de los principales egresos de estos sectores, de los cuales solo el rubro gastronómico está operando de manera parcial, mientras que lo demás están parados de hace casi 7 meses.