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La Junta Municipal asuncena aprobó ayer, en menos de 24 horas, una autorización para que la intendencia pueda hacer un préstamo que será utilizado para el pago de salarios a sus casi 10.000 funcionarios. El intendente Óscar Rodríguez podrá pedir un monto de hasta G. 246 mil millones.
Uno de los que manifestaron su oposición fue el concejal Federico Franco Troche, que este viernes conversó con ABC y explicó que esta decisión impactará en la composición del gasto de la Comuna porque la deuda va a ir creciendo. Sin embargo, los recursos para inversión física se “congelaron” entre el 9 y el 10% de los ingresos por año.
“Los ingresos totales de la Municipalidad tienen un promedio de aumento de 4 a 6% (por año), pero los gastos van de 8 a 10%. Los gastos superan a los ingresos, entonces estamos en déficit que no logra revertirse”, sostuvo.
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El edil contó a ABC que, pese a que algunos años la Comuna recibe más dinero como ingresos genuinos (impuestos, etc.), el balance arroja este déficit. Esto se debe, en su opinión, a la incorporación de funcionarios como parte de una función que tiene como “aparato electoral”. Esto también hace que personal calificado salga de la Comuna porque no recibe una remuneración adecuada.
“Tenemos una situación de RR.HH. que es delicada, a pesar de que van aumentando, no van siendo calificados o pagados de acuerdo a su gestión. Funcionarios antiguos van quedando, se va vaciando la capacidad intelectual de la municipalidad. Por ejemplo, si en tránsito había 10 técnicos en 2010, hoy hay un técnico”, indicó.
Para el concejal, Asunción necesita una inversión cercana a los US$ 1.200 millones anualmente, pero invierte solo US$ 10 millones. “Evidentemente, la municipalidad se convirtió en un aparato electoral (…) Lamentablemente, solo termina ofreciendo cargos a la ciudadanía. Hoy, la municipalidad puede definirse así porque cada año degrada una inversión en infraestructura”, explicó.
Franco Troche argumentó también la oposición al pedido de préstamo porque, pese a la pandemia, los ingresos de la Comuna cayeron solo en 13%, una cifra relativamente baja, y destacó el acompañamiento y compromiso del contribuyente capitalino.
“Es una situación muy difícil que atraviesa Asunción. Asunción tiene que ser una causa nacional; de lo contrario, su administración no es sostenible a corto plazo (…) Por ejemplo, se invierte en pavimentación, pero no en el ciclo del agua. El pavimento que se hace, el bacheo, no dura, porque el suelo no está en condiciones. El agua de Essap se pierde en 50% (en su sistema de distribución)”, agregó.
Finalmente, dijo que tras los hechos del 19 y 20 de diciembre del año pasado, cuando la Fiscalía intervino por el caso de las “cajas paralelas”, que generó la renuncia de Mario Ferreiro, se quiere dar la imagen de que cambió todo y eso no es así porque “Asunción tiene un problema estructural, de desidia, que no tiene nada que ver con Mario Ferreiro u Óscar ‘Nenecho’ Rodríguez”.