El Ministerio de Salud informó sobre el fallecimiento de otros siete pacientes infectados con coronavirus, en tanto que 499 fueron diagnosticados con la enfermedad.

Fuentes de la institución aclararon sin embargo, que estos números no son el resultado de un solo día de conteo, ya que cinco fallecidos son de ayer y hoy, y dos del 4 y 5 de agosto, cuyos estudios confirmaron recién este miércoles que tenían COVID-19. En cuanto al número de contagios, el 25% son de las últimas 72 horas, 50% de siete días y 25% de los primeros días de agosto.

En referencia a los fallecidos, fueron cinco víctimas masculinas y dos femeninas. Tres hombres de 22, 42, y 59 años que se encontraban hospitalizados en Instituto Regional de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente (INERAM); un hombre de 68 años y una mujer de 40 años, que estaban en el Hospital Regional de Coronel Oviedo; y una mujer de 69 años, internada en el Hospital Regional de Concepción.

Además, la cantidad de recuperados llega a 5.384, con otras 58 altas médicas. En terapia intensiva están 35, de los 93 hospitalizados.

Con los datos de la fecha, la cantidad de víctimas fatales a causa del COVID-19 asciende a 93 y los afectados ya suman 8.018.

Durante este mes, el ritmo de contagio comunitario de la enfermedad aumentó significativamente. El director de vigilancia de la Salud, Guillermo Sequera, explicó que el ritmo de contagio y de fallecidos que se dan actualmente, de casos COVID-19, aún es aceptable. Y si bien hay aumento de confirmados, todavía “no es un pico”.

Nota relacionada: Según Sequera, este ritmo de contagios “es aceptable”

Además, agosto es el mes con más decesos por coronavirus, puesto que en julio sumaron 32, en junio 6, en mayo uno, en abril siete mientras que en marzo, se registraron tres decesos.

Por otra parte, desde el Ministerio de Salud insinuaron que existe una posibilidad de volver a fase cero los fines de semana en zona Central. Diversos gremios de las fuerzas vivas advierten que sería un “golpe mortal” a la economía. Piden insistir con normas sanitarias, que son de fácil cumplimiento, y no acogotar al país. UIP califica la posibilidad de “nefasta” y señala que los más perjudicados serán los trabajadores.