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“Pudimos hablar sobre temas relativos al crecimiento de la industria en el Paraguay. Creemos que están dadas las condiciones para que la industria sea el motor que mueva la reactivación económica y sabemos que no existe otro sector que pueda resolver el problema principal que normalmente tiene nuestro país, que es la falta de empleo, y ahora en especial que hay mucha gente que está sin trabajo, sin ingreso y que tiene que acceder a los planes que hay”, manifestó Volpe tras la reunión con Mario Abdo.
“Hablamos de cómo podemos implementar todo esto que propusimos. Presentamos una política industrial para que nos haga un camino. Hay que mencionar que la industria es el sector que más creció en los últimos diez años. Presentamos propuestas, varios ítems como en energía eléctrica, obras de infraestructura, compras públicas, etc.”, añadió.
En cuanto a la preferencia de las industrias en las licitaciones, Volpe señaló: “Si bien no fue promulgada la ley que pretendía que la industria paraguaya tenga una preferencia, vamos a seguir trabajando en conjunto, vamos a ver cómo podemos hacer para que la industria paraguaya tenga mayor participación en las compras públicas. Creo que el porcentaje del 20% es insuficiente, porque las empresas que accedieron a proveer al Estado a través de este porcentaje (...) es ínfimo”, dijo.
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“Aquí se habló de que el Estado va a comprar 40% más caro y eso es absolutamente falso, porque cuando una institución pública llama a licitación se establece un precio de referencia”, apuntó.
Ante la consulta de cuál fue la respuesta de Mario Abdo, respondió: “El Presidente dio la justificación y estamos de acuerdo de que aquí hubo un compromiso con la Unión Europea e hicieron una excepción en su momento, que significaba que nos iban a dejar con el 20% de preferencia ante las compras públicas. Si en este momento él promulgaba una ley del 40% le iba a dejar muy mal parado para las futuras negociaciones”, expresó.
“Pero también hay que tener en cuenta que el acuerdo con la Unión Europea tampoco está vigente y hay una prelación de las leyes, la pirámide de Kelsen: significa que si hay un acuerdo internacional y una ley que está en contra, el acuerdo internacional está por encima, por lo tanto la ley queda derogada. Vamos a hacer el lobby correspondiente para que el Congreso rechace el veto”, anunció.
“Le planteamos que la ley va a firmar un pacto o contrato, para que si se logra que el veto sea rechazado por el Congreso, la UIP va a ser el vigilante de que no haya ninguna distorsión como se dice por ahí”, comentó finalmente.