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La ampliación de la imputación fue presentada por los fiscales intervinientes Irene Álvarez, Lorenzo Lezcano, Carlos Maldonado y Gedeon Escobar, contra Reiner Helmut Oberüber, padrastro de Yuyú, la menor de 7 años que se encuentra desaparecida desde el 15 de abril.
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Esta diligencia se dio luego de que se lograra extraer datos de artefactos informáticos, que fueron incautados durante la serie de allanamientos realizados por la Fiscalía. Los peritos encontraron imágenes de pornografía infantil en el teléfono celular del padrastro de Juliette, especificó el fiscal Lorenzo Lezcano, en comunicación con ABC.
Tanto el hombre de nacionalidad alemana como la mamá de la niña, Lilian Zapata, fueron imputados ya anteriormente por la violación del deber de cuidado y abandono, por lo que se encuentran con prisión preventiva desde el 5 de mayo de este año.
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En reiteradas ocasiones, familiares de la niña desparecida y representantes de las organizaciones “Ni un niño más” y “Justicia para un ángel” se manifestaron frente a la sede del Departamento Judicial de la Policía Nacional, en Asunción y en Emboscada, y la Comisaría de Mujeres de Trinidad pidiendo celeridad en las investigaciones. Rufino Zapata, abuelo de la nena y padre de Lilian Zapata, pidió el fin de los “privilegios” para el padrastro de la menor.
Por su parte, el comisario Gilberto Fleitas, director de Investigación de Hechos Punibles de la Policía, expresó en relación a la investigación que “desde un principio manifestamos que va a ser el caso más complicado del año”. Añadió que por cuestiones propias de la experiencia en procesos similares y las características propias de cada situación puede identificar “cuándo se va a complicar” una investigación.
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A más de tres meses desde que Juliette Le Droumaget (7), más conocida como Yuyú, desapareció misteriosamente no hay pistas sobre su paradero a pesar de todos los procedimientos realizados por la Fiscalía y la Policía en su búsqueda. La niña fue vista por última vez cuando estaba jugando en el patio trasero de su casa en Emboscada.
Uno de los hechos más llamativos del caso es que la menor cuenta con dificultades para desplazarse y a pesar de tener 7 años, tendría la edad mental de 4, por lo que desde un primer momento se manejó la información de que no pudo haberse ido muy lejos por su cuenta.
Otro elemento curioso consiste en que su madre, Liliana Zapata denunció la desaparición de la niña –de nacionalidad francesa– ante la Policía recién al día siguiente, el 16 de abril.