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El presidente de la República, Mario Abdo Benítez, inauguró hoy el primer viaducto construido en Santaní, San Pedro, además de la rehabilitación con pavimentación asfáltica del tramo Choré-Cruce Liberación.
En el evento estuvieron presentes los ministros de gran parte del Gabinete. En su discurso de casi media hora, el Presidente usó al menos siete minutos para saludar a sus colaboradores. Hizo especial énfasis en defender a Julio Mazzoleni, criticado duramente por su administración al frente del Ministerio de Salud en cuanto a la ejecución de los fondos de emergencia para la lucha contra el coronavirus.
Lo llamativo es que el propio Abdo Benítez había criticado la ejecución presupuestaria de Mazzoleni en su informe al Congreso el 1 de julio pasado al señalar que “no estaba conforme” que se gasten —hasta ese momento— US$ 4 millones de los US$ 94 millones que recibió el MSP de Hacienda para la compra de insumos.
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“A nuestro querido amigo… mucho se le está… él no viene de la política, a él le ha de afectar el doble y a su familia, acá el capitán Mazzoleni. Yo le saqué del sector privado al pobre para venir aquí a ayudarme. Y bueno, te encontraste con la pesadilla del servicio público, pero también con lo gratificante que es el servicio público. Pero no te vayas a preocupar por las críticas”, dijo el jefe de Estado durante su discurso.
Otro de los puntos curiosos de lo dicho por el Presidente tiene que ver con el vínculo de las críticas con el no hacer nada, “ni siquiera una olla popular”, que son eventos solidarios realizados, justamente, por la incapacidad del Estado de asistir a los más vulnerables.
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“La mayoría de los que critican nunca han hecho nada, ni una olla popular no contribuyeron para hacer. Vos salvaste muchas vidas y nadie va a borrar eso”, dijo.
Pero, sin duda, el momento más contradictorio del discurso del mandatario fue cuando repelió las críticas y a sus detractores diciéndoles que no les va a responder más.
“Algunos dicen ‘no hace autocrítica el Presidente’. No hace falta. Todo el día tenemos quienes nos critiquen. Lo que yo hago todos los días es tratar de defender nuestra gestión con argumentos, no con falacias (…) A los que critican no les vamos a contestar nada. Que sigan criticando, no les vamos a contestar ningún agravio a nadie, dejen que se plagueen (se quejen) solos. Nosotros vamos a demostrar con trabajo”, expresó.
Sin embargo, minutos después, dijo que “las críticas son necesarias para construir un debate nacional equilibrado”. El jefe de Estado concluyó afirmando que “le guste o no le guste a la gente, Paraguay es un ejemplo para la región en cuanto al combate al coronavirus”.