Con hashtag #AlexaNoEstáSola, exigen justicia para joven manoseada por sacerdote

Con el hashtag #AlexaNoEstáSola, el colectivo de feministas exigen en las redes sociales justicia para la joven universitaria que fue acosada en 2016 por el entonces párroco de Limpio, Silvestre Olmedo, según reconoció el mismo religioso. Para mañana está previsto que se inicie el juicio oral y público contra el sacerdote, quien ya en una anterior ocasión logró suspenderlo.

Silvestre Olmedo estuvo una semana en la cárcel de Emboscada.
Silvestre Olmedo estuvo una semana en la cárcel de Emboscada.

Cargando...

Activistas feministas y simpatizantes se sumaron al tuitazo a partir de este mediodía en las redes sociales, para exigir que se haga justicia en el juicio oral y público que debe afrontar mañana el sacerdote Silvestre Olmedo Lezcano (60) en el Juzgado de San Lorenzo. Los internautas postearon mensajes de apoyo a la víctima, una joven que en ese entonces tenía 20 años y era la coordinadora de la Pastoral de la Juventud de Limpio, usando las etiquetas #AlexaNoEstáSola y también #JusticiaParaAlexa.

El sacerdote acusado pos acoso sexual había reconocido, en un “mano a mano” con jóvenes de la Iglesia, que le tocó los pechos a la víctima. Lo que no sabía el religioso es que estos chicos grabaron la conversación y la filtraron a la prensa.

Inicialmente Silvestre Olmedo fue imputado de coacción sexual y violación, hecho punible que en ese entonces tenía una expectativa de pena de hasta 10 años de prisión. Estuvo una semana en la cárcel de Emboscada y recuperó su libertad cuando la Fiscalía cambió la carátula de la investigación por el delito de acoso sexual, que tiene una expectativa de pena de entre 6 meses y dos años de prisión y que, además, es excarcelable.

Lea también: Fiscalía cambia carátula y cura sale de la cárcel

El tuitazo es impulsado por el Consultorio Feminista, conformado por un grupo de abogadas activistas que asumieron la querella adhesiva de forma probono. Acompañan a la víctima en su búsqueda de justicia y en representación de un apoyo a todas las mujeres víctimas de todo tipo de violencia, indicaron desde la organización.

Juicio suspendido

Inicialmente el juicio se había fijado para el 6 de junio del año pasado, pero en dicha oportunidad el sacerdote presentó -a través de su abogado Rodrigo Yódice- incidentes que fueron rechazados por el Tribunal de Sentencia. Posteriormente recusó a los tres jueces, por lo que se suspendió.

Lea más: Se suspende juicio contra sacerdote

La jueca Letizia de Gásperi (presidenta) es la única que permanece como integrante del Tribunal original. Los otros magistrados son Dina Marchuk y Hugo Segovia, en tanto que está como suplente Alicia Orrego.

El arzobispo arzobispo de Asunción, Edmundo Valenzuela (actualmente renunciante), al igual que el vicario general del arzobispado de Asunción, el sacerdote Óscar González; el exvicario general y actual canciller, el sacerdote Martín Ortiz, y el extitular del Decanato 9 y ahora párroco de Areguá, el sacerdote Dionisio Echagüe, fueron convocados a declarar en el juicio oral y público a Silvestre Olmedo.

Lea más: Autoridades de la Iglesia explicarán “conducta indecorosa”

Estas autoridades eclesiásticas conformaron una comisión para investigar internamente al entonces párroco de Limpio.

No perderá estado clerical

Recién después de que el manoseo tomó estado público, las autoridades de la Igelsia católica en Paraguay decidieron abrir una investigación y apartar a Silvestre Olmedo del cargo. El mismo arzobispo Valenzuela, en una carta dirigida a la Pastoral de Juventud de Limpio, calificó el hecho como “una piedrita” porque -según lo repitió en varias ocasiones- el acoso sexual no es lo mismo que el abuso sexual de menores.

Y si bien confirmó que Silvestre Olmedo efectivamente manoseó a la víctima, también pidió a los creyentes que se cuide la información de este tipo de incidentes para evitar daños mayores en la Iglesia.

Nota relacionada: Acosadores y pederastas, al banquillo

Igualmente, ya se adelantó que el sacerdote no perderá su ministerio, independientemente de si es encontrado culpable o no.

Es que el Art. 1395 del Código del Derecho Canónico establece la expulsión del estado clerical cuando un sacerdote comete “un delito contra el sexto mandamiento del Decálogo, cuando este delito haya sido cometido con violencia o amenazas, o públicamente o con un menor que no haya cumplido dieciséis años de edad”.

/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=2074
Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...