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De acuerdo a los datos, los trabajos de restauración del Palacio Alegre, sede del Ministerio de Hacienda, en la intersección de las calles Palma y Chile del microcentro de Asunción, permiten hoy dar una mirada a la arquitectura de principios del siglo pasado.
Todos estos trabajos corresponden a la licitación pública nacional con ID Nº 372.143, adjudicada a Juan Carlos Sánchez Báez, por un monto de G. 6.310 millones y un plazo de entrega de 300 días calendario.
El último reporte presentado por los intervinientes señala que en la fachada Palma, el retiro de la pintura deja al descubierto los detalles del revoque símil piedra característico del edificio, lo que permite también tener una mirada a la arquitectura de principios del siglo pasado.
“Con ello no solo podemos rescatar los valores matéricos, es decir, pertenecientes a los materiales utilizados en la obra, propios de los elementos constitutivos que están siendo objeto de estas tareas, sino que a la par, enfatizar el protagonismo que desprenden cada una de las intervenciones originales de la fachada: molduras, ornatos, ménsulas, cornisas en sí mismas y en su conjunto, a la fachada toda”, resaltó el boletín de prensa de la institución.
Hay que resaltar que este plan de restauración fue elaborado entre el MOPC y la Facultad de Arquitectura, Diseño y Arte de la Universidad Nacional de Asunción (UNA).
Historia del Palacio
El Palacio Alegre, hoy Ministerio de Hacienda, y su cúpula, la tercera en importancia en Asunción, fue originalmente residencia del inmigrante español don Juan Alegre, quien había arribado al Paraguay a fines del siglo XIX para dedicarse al comercio.
La construcción fue atribuida al italiano Carlo Pozzi y en el año 1903 Alegre estableció su casa de modas y novedades El Paraíso, negocio que prosperó rápidamente, convirtiéndose en un establecimiento de gran prestigio.
Aunque no existen documentos sobre la fecha exacta de su construcción, las referencias gráficas y publicitarias apuntan a los años 1911 a 1920.
A fines de la década del 40, el edificio fue alquilado al Estado Paraguayo para sede del Ministerio de Economía (creado en 1933), hoy de Hacienda.
Es una obra digna de ser ponderada porque, a más de ser un excelente ejemplo de arquitectura neoclásica, se constituye en uno de los más fehacientes testimonios del repunte económico que experimentó el Paraguay a principios del siglo XX.
