Cargando...
Adriana Chaparro, vocera del gremio, manifestó que la asociación cumplió el rol articulador de realizar una licitación pública nacional para la provisión de batas hospitalarias de confección nacional. “Estamos acompañando la elaboración del pliego de bases y condiciones, haciendo los ajustes y sugiriendo algunas modificaciones que ahora se plantean porque se trata de un artículo que normalmente se importaba y ahora nosotros lo confeccionaremos”, expresó. A modo de ejemplo mencionó que se puede realizar por las tallas, y no un tamaño único.
Mencionó que, de forma paralela, las empresas se están preparando para presentarse al llamado a ser convocado por el Ministerio de Salud. En este punto señaló que el gremio hizo una suerte agrupador de empresas para que exista mayor participación y precisó que 120 firmas se inscribieron, entre las cuales hay varias del interior del país como de Yaguarón, Ciudad del Este, Yataity, Luque, Pilar, entre otros. “En los recorridos de los talleres se constató que algunas firmas no cumplen con los requerimientos sanitarios para ser proveedoras del Estado, pero al personal se le puede trasladar a un taller habilitado, será subcontratado”, precisó destacando la posibilidad de generar trabajo pese a ciertas exigencias de salubridad.
La posibilidad de confeccionar las batas hospitalarias se anunció hace un mes, tras lograr un “tejido inteligente” que denominado “NTA 98”, que son las siglas de “No Tejido AICP” y la cifra es porque tiene un 98% de resistencia microbacteriana, certificada por el Instituto Nacional de Tecnología, Normalización y Metrología (INTN), según lo explicado.
Para garantizar la participación de diversos sectores, el gremio había definido una clasificación de las firmas en tres líneas: La primera, que serán aquellas que cuentan con experiencia en ser proveedora del Estado y serían 15 en total; la segunda, serán las que vendan el producto terminado a primera línea, y la tercera, que se dedicará a la producción.
Una vez que se realice la adjudicación, las empresas realizarán el pedido de materia prima para la confección de batas, explicó Chaparro, quien estimó que estaría listo el producto en unos 15 días. “A mediados de agosto estimamos que podríamos entregar los primeros pedidos”, opinó y agregó que la demora se debe más a la burocracia aunque destacó que los socios están tranquilos debido a que todo el proceso se realizó bien y con transparencia.
La Asociación de Confeccionistas del Paraguay (AICP) tuvo por objetivo la articulación para lograr la participación de todas las empresas interesadas, de forma coordinada, para una provisión eficiente. En cuanto al mecanismo para la producción, se mencionó que tiene como base la solidaridad y buena fe “grandes empresas que pueden entregar la totalidad del pedido, distribuirán el trabajo con las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes)”, expresa y añade que la misión es que exista oportunidad para todos.
Por otra parte, se destaca que con el trabajo gremial, y la estipulación de los términos del acuerdo nacional, se habría dado el escenario habitual de “dura lucha de precios y solamente un par de empresas oferentes adjudicadas, dejando de lado a cientos de talleres sin la mínima posibilidad de trabajo”.
Conforme se adelantó, el Estado comprará 3 millones de batas, que serían entregadas hasta diciembre, que conforme a lo explicado serían 600.000 batas al mes y la cifra de producción podría ir variando, conforme a la evolución y la necesidad durante la pandemia. En cuanto al valor del contrato, sería de unos US$ 20 millones, que es “sumamente importante para la industria en estos momentos”. En cuanto al precio de cada unidad se conocerá al publicarse el llamado en el portal de Contrataciones Públicas.