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“Esto se tiene que revertir, no ir regalando, se debe ayudar al que necesita y no al que no necesita”, aseveró el titular del gremio de industriales, Gustavo Volpe, sobre la ley que pretende la cancelación de facturas y exoneración de pagos por seis meses a usuarios de la ANDE con consumos de hasta 1.000 kmw. Según manifestó, se necesitarán más de US$ 300 millones para cubrir los gastos generados por la normativa, monto que podría llevar a la quiebra a la empresa estatal. Esta ley podría dar un golpe mortal a la ANDE, podría causar muchos problemas y hasta una quiebra”, subrayó.
Indicó que pretender exonerar a los consumidores el consumo durante los meses de cuarentena por el COVID-19 es un despropósito porque beneficiará a aquellos que si están en condiciones de hacer los pagos que corresponden.
Asimismo, comentó que en la última reunión con los integrantes del gremio, trataron el tema y de forma unánime decidieron solicitar al Poder Ejecutivo el veto a dicha ley. En mis años de vida de la UIP, nunca vi una unanimidad como en la que se dio en emitir el comunicado”, contó.
Apunto, además que pretender que se anulen facturas y se exonere el consumo a usuarios que utilizan hasta 1.000 kwh beneficiará a aquellos que no lo necesitan. También pidió que se investigue y se sancione a los responsables de la emisión sin lectura de medidores. “Esto se tiene que revertir, no ir regalando, se debe ayudar al que necesita y no al que no necesita”, señaló.
En otro punto, Volpe sostuvo que el tema de la sobrefacturación “se tomó a la ligera” y que no era descabellado hacer un promedio de consumo para definir el monto de las facturas sin lectura de medidores, pero que este cálculo se hizo mal.
Manifestó que el gremio está estudiando algunas alternativas para corregir el error de la ANDE y ayudar a los ciudadanos que fueron afectados por la pandemia. “Hay que ayudar al que necesita no al que no necesita”, recalcó.
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