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Zulma Gómez (PLRA) fue diputada por Alto Paraná entre el 2003 y el 2008. Cumple ahora su segundo periodo como senadora, puesto que ostenta desde el 2008. Su hijo, Javier Bernal, es concejal de Ciudad del Este por el PLRA, cargo que antes ocupó su hija, Guadalupe Bernal.
Hoy la Contraloría General de la República publicó las declaraciones juradas que Zulma Gómez presentó en los años 2012 y 2017, pero no se dieron a conocer las que debió presentar todas las veces que juró, primero como diputada y luego como senadora, y todas las veces que feneció un mandato.
En el comparativo de las DDJJ de 2012 y 2017 sobresale el hecho de que sus deudas no variaron en absoluto. En 2012 declaró un crédito del Fondo de Jubilaciones por G. 215.493.395, cuya cuota mensual era de G. 16.576.000. También declaró un crédito AFD de G. 648 millones, cuya cuota era de G. 3.600.000. En el documento de 2017, estas deudas, que ascienden a G. 863.493.395, están intactas.
Los ingresos de la senadora, de G. 41 millones, incluidos la remuneración como legisladora, alquileres y bonos de combustible, tampoco se modificaron y siguió gastando en 2017, como en 2012, G. 500 mil en mantenimiento de vehículo, G. 800.000 en personal doméstico, G. 400 mil en cable y seguridad, por ejemplo.
Lo único que varió, y que la senadora lo atribuye a un error involuntario, es que en la DDJJ de 2012 figuran G. 350 millones en mobiliarios y G. 200 millones en joyas y obras de arte. En 2017, la declaración jurada aclara que debían ser G. 35 millones en mobiliarios y G. 20 millones en joyas y obras de arte, pero que “por herror involuntario se agregó un cero más en la anterior declaración”(sic).
A la legisladora se la conoce, entre otras cosas, como libero-cartista por sus posiciones de apoyo al ex presidente Horacio Cartes. También porque tiene un tendal de parientes en la función pública y por sus viajes alrededor del mundo con el argumento de participar en conferencias de todo tipo.