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“Entre 200 a 250 escuelas pueden cerrar fácilmente hoy y más de 15.000 alumnos podrían quedar afuera”, mencionó Ramírez, que además advirtió que para el sector educativo incluso el panorama se muestra aún peor. “Se está poniendo muy difícil, este es un año que más o menos se va a terminar equilibrado, pero el año que viene no sé cómo se va a poder comenzar. Esto va en un proceso que va devastando la posibilidad de mantener la educación privada”, indicó.
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Advierten que muchos padres están optando este año por mudar a sus hijos a instituciones públicas, lo cual actualmente no genera mucha diferencia para los alumnos, pero para las instituciones privada, puede implicar un cierre definitivo. “Eso lo que genera un daño a la institución porque el próximo año cuando quiera venir la institución ya no va a estar”, expresó.
“Hay una crisis importante, eso está repercutiendo en el despido de maestros, no hay condiciones de mantener las instituciones y entonces hay una reducción de maestros, un cierre paulatino de escuelas, 90 jardines cerrados absolutamente, eso va a ir en aumento porque precisamente es el lugar más difícil de hacer a distancia”, comentó.
Agregó que en las guarderías ya se registran al menos unos 1.500 despidos y en los colegios, si bien la cifra es menor, también muchos docentes nuevos, personal de apoyo y otros. Comentan que el problema con el que lidian no solo son los descuentos de las cuotas, sino la mora para el pago de las mismas.
“Te hago un descuento pero después tenés que soportar la mora. Por ejemplo, en un colegio grande y emblemático de 1.800 alumnos, solo 300 están al día. ¿Cómo se sostiene esto?”, se cuestionó. Respecto a un eventual apoyo económico de parte de las autoridades nacionales, dijo que están en etapa de conversaciones, pero hasta el momento no se pasa de la etapa de la planificación.