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Los afectados por la situación viven bajo precarias carpas desde hace más de tres años, en la ex pista de aviación de dicha comunidad, dentro de las extensas tierras de la ex Colonización Militar, que originalmente tenía 42 mil hectáreas. Está a 80 kilómetros de esta ciudad, a un costado de la ruta PY03. La lucha de dichas familias es por conseguir una parcela de tierra para cultivar.
La comisión se llama “8 de Diciembre” y está encabezada por Esmelda Ríos Cáceres “Ña Meli”, acusada por las familias bajo carpa de abandono y especulación.
Pedro Espínola, uno de los afectados, dijo que el Instituto de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert) ya ofreció dos o tres lugares a dicha dirigente para asentar a sus seguidores, pero que la misma rechaza las ofertas. Las propiedades que fueron ofrecidas serían de 90 a 120 hectáreas.
El rechazo por parte de Ña Meli sería porque pretende miles de hectáreas de tierra para asentar a unas 500 a 700 personas, que la misma tiene censada, sin que todos sean precisamente auténticos sintierra. Cada censado habría pagado un millón de guaraníes, según Espínola.
La dirigente reconoció, que, efectivamente, el Indert le ofreció una parcela de 120 hectáreas para asentar 100 familias, y que fue rechazada porque la propiedad ofertada es muy pequeña para esa cantidad de familias y no es apta para la agricultura. “Es una zanja llena de piedra y esteral. De toda la extensión, ha de haber tres hectáreas que servirían para cultivar, y nosotros queremos tierra para la reforma agraria”, explicó.
La dirigente dice que efectivamente su pretensión es asentar a 100 familias, pero con una dimensión de 10 hectáreas por familia.
Reconoce, sin embargo, que el Indert viene transfiriendo en los últimos años grandes parcelas de tierra a sojeros brasileños, en total contradicción a la ley de la Reforma Agraria. En varias ocasiones fue planteada la realización de una mensura judicial de las 42 mil hectáreas, pero que nunca se pudo concretar. “Ellos vendieron toda la tierra, y deben recuperar de los empresarios y entregar a los sujetos de la reforma agraria”, señaló.
Por último, Ña Meli dijo que analizará aceptar la oferta de 120 hectáreas del Indert, y desde allí continuar luchando por tierras aptas para el cultivo donde asentar a sus seguidores.