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“Esta situación nos obligó como ministerio a explorar caminos que no estaban pensados y nos obligó a avanzar. Nos convertimos en productores de televisión, en editoriales para poder llegar a los alumnos. Estamos trabajando en una educación colectiva con padres, alumnos y docentes para definir el protocolo para la vuelta paulatina al aula, pero debo aclarar que no hay fecha, eso lo va a decidir el Ministerio de Salud”, dijo el viceministro de Educación Robert Cano en ABC Cardinal.
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Agregó que están diseñando distintos escenarios como un punto de partida para el diálogo colectivo, pero la vuelta a clase será un “retorno voluntario”. Es decir, no se le obligará al alumno a volver y se deja esa decisión a los padres.
Explicó principalmente que se está trabajando con los estudiantes de tercero de la media y el noveno grado que son los que cierran un ciclo este año. Se trabaja con un eventual retorno gradual, pero si el Ministerio de Salud autoriza, no se va a tomar ninguna decisión unilateral, aclaró el secretario de Estado.
“No va a haber una obligación a los padres a que envíen a sus hijos, sino es una acción voluntaria. El criterio será de retorno voluntario y bajo un régimen de seguridad y sanitario muy estricto”, puntualizó Cano.
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En cuanto a la evaluación de cómo la modalidad virtual está llegando a los estudiantes del país, manifestó que se llega a un 91 por ciento de la población matriculada este año. De ese porcentaje se llega a un 87 por ciento mediante los medios virtuales, es decir, plataformas virtuales, mensajes de WhatsApp o televisión, un 10 por ciento por medios físicos, es decir, se les llevan las tareas a sus casas o los padres retiran de las instituciones educativas. En tanto que un 3 por ciento de los estudiantes perdieron contacto con el sistema educativo.
“La evaluación con los niños también es compleja porque las escuelas se trasladaron a las casas; entonces esa evaluación es muy compleja. Ahora estamos evaluando el alcance que tenemos y hay un 3 por ciento de los alumnos con quienes perdimos contacto. Estamos trabajando para llamarlos y tratar de introducirlos de nuevo al sistema educativo para que no pierdan el año”, dijo el viceministro.
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No desmatricular
Por otro lado, muchos padres se están planteando desmatricular a sus hijos por este año porque lo consideran un año perdido, pues el aprendizaje no es el adecuado. Sobre este punto, el viceministro instó a no hacerlo, aunque reconoció que existen falencias.
“Recomiendo a los padres no desmatricular a sus hijos, porque eso sería un perjuicio enorme; si bien es complicado, debemos adaptarnos a esta nueva normalidad y avanzar, no retroceder en la educación. Este año será una manera virtual, tenemos que adaptarnos; es cierto que los padres ahora deben hacer un esfuerzo mayor, pero tenemos que ajustar nuestra rutina en pos de la educación de nuestros hijos”, dijo Cano y pidió además comprensión a los padres porque esta situación es atípica y todos debemos adaptarnos, no podemos dejar sin una enseñanza por un año a los niños.