“Al leer sobre los síntomas, ya supe que tenía COVID-19”

Ariel Villalba, paciente paraguayo recuperado del COVID-19, relató en vivo para ABC todas sus vivencias desde la confirmación de su enfermedad hasta su total recuperación. Confesó que desde que leyó sobre los síntomas, antes de tener en sus manos el resultado positivo, ya supo internamente que tenía la enfermedad, por lo que escogió tomar una actitud de tranquilidad y fe.

Ariel Villalba, paciente recuperado de COVID-19, junto a su esposa, Zulma.
Ariel Villalba, paciente recuperado de COVID-19, junto a su esposa, Zulma.

Cargando...

Acompañado de su esposa, Zulma, Ariel Villalba visitó los estudios de ABC, donde relató su testimonio y todas las vivencias que atravesó durante el tiempo que duró su enfermedad. Comentó que si bien cuando comenzó a sentirse mal lo primero que sospechó fue que tenía dengue, luego de interiorizarse bien de los síntomas del nuevo coronavirus, inmediatamente tuvo la certeza de que él era portador del COVID-19. Todo esto antes de tener en sus manos el resultado positivo, por lo cual, desde un primer momento, decidió tomar una actitud de tranquilidad y fe ante la adversidad.

Ariel contó que fue fundamental para superar el virus el respaldo incondicional de su esposa, quien cada mañana lo alimentaba siguiendo todos los protocolos de seguridad para prevenir el contagio, e incansablemente realizaba la limpieza y desinfección del pequeño departamento que comparten con sus hijos.

A pesar incluso de compartir el mismo sanitario, milagrosamente ni la esposa ni los niños dieron positivo al COVID-19, gracias al cuidado extremo que tuvieron.

El héroe de sus hijos

Emocionado, Ariel recordó que fue difícil para sus tres hijos entender que era necesario aislarse de papá. En especial para los más pequeños, que se mantenían pendientes de la habitación donde Ariel guardaba aislamiento y cada vez que él se levantaba, deseaban saludarlo al menos desde lejos.

Su esposa confesó que incluso en algunas ocasiones rompió ciertos protocolos, como tomar al mate, todo para no perder la costumbre de compartir con su esposo y preservar la unión familiar.

La oración es un componente que nunca le faltó a la familia, pues son personas de fe acostumbradas a la vida espiritual desde antes de pasar por esta prueba. Es por eso que Zulma, siguiendo todos los protocolos de desinfección, solía ingresar a la habitación de aislamiento de su marido y oraba por él.

En síntesis, no se dejó llevar por el temor, sino más bien por el amor y el sentido común, cambiándose de ropa cada vez que interactuaba con Ariel y desinfectando con una disciplina extrema cada rincón de la casa.

Hoy esta familia que eligió sonreírle a tan enorme dificultad que les puso la vida, y tenerle “respeto, pero no miedo” a la enfermedad, encuentra en el amor el alivio de la prueba superada, y alientan a todos los pacientes positivos a seguir el mismo camino.

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...