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“En farmacias hay aún tapabocas, pero en algunas ya no vas a conseguir”, dijo Guaragna en conversación con radio ABC Cardinal. Esto es a raíz de la rápida expansión mundial del coronavirus de Wuhan, conocido como COVID-19.
La presidenta de la Cafapar añadió que estos elementos sirven sean cuales fueren el tipo para prevenir el contagio masivo al filtrar parcialmente el virus. Existen distintos tipos de tapabocas y lo recomendable es cambiarlos a razón de dos a tres por semana, explicó.
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“Sirve porque estás tratando de protegerte y proteger. Hay personas que hasta se ponen doble. Tenés que cambiar periódicamente por lo menos dos a tres veces a la semana. Si la persona ya está enferma es otra cosa; si querés prevenir es otra cosa”, manifestó.
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El repunte de la venta de los tapabocas es un problema para el comercio local, porque no se producen en nuestro país y deben esperar la importación de otras localidades del exterior, puntualizó Guaragna, quien confirmó que en las próximas semanas se recibirán más insumos.
Esto se da en momentos en que el COVID-19 se propaga de forma más rápida en varios países del mundo. Desde su llegada a Europa el fin de semana pasado, la expansión se hizo más acelerada. Anoche se confirmó el primer caso en el Brasil, el primero de Sudamérica.
Expertos aseguran, sin embargo, que la tasa de mortalidad de este nuevo virus, que se originó en un mercado de Wuhan, China, en diciembre pasado, es baja en comparación con otras enfermedades. Sin embargo, el miedo parece haber preponderado en varias zonas a tal punto de desabastecer no solo la provisión de tapabocas, sino también la de alcohol en gel, cuyos precios en Europa treparon de forma exagerada.