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Según detalló la titular del Ministerio de Industria y Comercio (MIC), Liz Cramer, al contrario de restringir la soberanía para importar vehículos usados, lo que hace el acuerdo es respetar las leyes paraguayas y “respetar la soberanía conforme a su legislación vigente”.
“El Paraguay en esa materia demostró que tiene una constitución vigente, tiene leyes ambientales que se aplican al tema. La idea es que el rubro automotriz entre al Mercosur; el único que no tenía acuerdo bilateral era Paraguay, ahora ya tiene dos. Estos sientan las bases para un acuerdo automotriz, para que al fin uno de los sectores que no entraba al Mercosur entre”, se explayó la ministra.
En este mismo sentido, explicó que el acuerdo automotriz que se firmará con Brasil el próximo lunes a las 11:00 en sede de la Cancillería tiene una “base industrial que permite dar cobertura legal a la existente, para crecer en ese sector”.
En referencia a la integración de cadenas productivas globales, Cramer resaltó el hecho de que Paraguay es un mercado pequeño; por ende, posee limitaciones mayores.
Planteó, sin embargo, que en el caso de los mercados regionales que producen piezas de determinados productos podrían llegar a producirlos en Paraguay de una manera más competitiva. Así, dijo la ministra, podríamos posicionarnos “como un complemento y dar competitividad a la región”.
Bajo estas condiciones, precisó Liz Cramer, y teniendo en cuenta la existencia de un marco de legalidad bilateral que luego puede ampliarse a un marco Mercosur, el objetivo es que las grandes industrias “puedan mirarnos como base de operaciones para producción de una industria que puede ser mucho más abarcante. Ya no solo Brasil y Argentina, que no habían sido competitivos históricamente, porque siempre Brasil fue proteccionista y Argentina también, pero hoy se abren hacia la Unión Europea y tendrán que competir con autos europeos”.
Resaltó el hecho de que actualmente Paraguay tenga cooperación coreana, “que nos está asesorando en competitividad con miras a la industria coreana”.
Según afirmó la ministra, la mirada actual “va mucho más allá del vecindario, sobre todo con la industria automotriz que se maneja a nivel de regiones”.
Dentro de esa mirada regional que tienen las industrias automotrices, Cramer resaltó que Paraguay, con este acuerdo como documento legal, ahora puede salir a buscar “con toda legalidad nuevos clientes para la industria existente, así como nuevas potencialidades. Se nos abren las puertas para trabajar en cadenas mucho más amplias inclusive de valor”, celebró la titular del MIC.