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De acuerdo a lo señalado por el fiscal Castro, se acordó, acta de compromiso mediante, que los jóvenes liberarían el local, y que a partir del lunes, en horario de atención al público, de 07:00 a 13:00 horas, podrán estar dentro de la institución solicitando la información que necesiten, dentro de un marco de normalidad y de respeto, según dijo.
El representante del Ministerio Público señaló que los manifestantes entendieron que la institución municipal debe funcionar, sin perjuicio de que ellos puedan ejercer su legítimo derecho a manifestarse y plantear sus reclamos.
También se acordó que el próximo martes, el presidente de la Junta Municipal hará una convocatoria a sesión extraordinaria de la Junta Municipal para tratar el tema referente al pedido de intervención de la administración comunal por parte del Ministerio de Interior.
La salida puso fin a una grave tensión que se inició la noche del jueves, cuando hurreros del intendente Chávez coparon el edificio comunal, por el lado interior del enrejado que rodea el predio, cortaron la electricidad y el suministro de agua potable a la sede comunal, aislando a los jóvenes que estaban en su interior, e impidiendo que familiares de los mismos les hicieran llegar alimentos y agua.
Nos atacaron con bombas de estruendo (cebollones), huevos podridos y piedras. Rompieron con piedras las ventanas de vidrio y por ahí nos tiraban huevos podridos, y nos gritaban que iban a entrar y sacarnos a patadas. Por un momento tuvimos miedo por nuestras vidas. Por suerte estaban con nosotros dos policías femeninos y dos masculinos, cosa que agradecemos, señaló Nelson Montiel, vocero de los jóvenes.
Maciel sostuvo que la manifestación continúa, que esperan que las autoridades hagan su trabajo de investigar los hechos de corrupción existentes en la administración comunal, y afirmó que la acción desesperada del intendente de convocar hurreros rentados es un indicio de que está desesperado, porque no tiene elementos con qué defenderse de la justicia.
Violentos y agresivos
Los partidarios del intendente Chávez se mostraron en todo momento agresivos y violentos, al punto de atacar con agua y piedras a un periodista de este medio que se acercó con el propósito de interiorizarse de lo que estaba pasando en el interior de la Municipalidad.
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Entre los más enardecidos los vecinos identificaron a un tal Yiyo Borda, quien amenazó con agresiones físicas al periodista, y a un tal Juan Vicente Oviedo Portillo, un lugareño con antecedentes por hurto agravado, quien agredió arrojando agua, afectando a la cámara que portaba el comunicador.
En todo momento se mostraron violentos y agresivos. Incluso después que los jóvenes abandonaron la sede municipal, desde el patio del edificio los “chavistas” arrojaron todo tipo de elementos hacia la carpa en la que se encontraban los manifestantes opositores al intendente, en la vereda opuesta al edificio.