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En el lugar fueron recibidos por la propietaria de uno de los inmuebles que se identificó como Cinthia Alonso y que se mostró muy molesta por la fiscalización. La mujer alegó que se presentaron todos los documentos de permisos y licencia ambiental al MADES, gestión que estuvo a cargo de un consultor.
Sin embargo, dijo que no sabía en qué situación se encontraba el expediente. Alonso no tenía ningún documento que le habilite a realizar la construcción, en el momento del procedimiento.
El muelle privado hecho de madera tiene una longitud aproximada de 50 metros con barandas de protección y se inicia en la residencia y termina en el lecho del lago.
Carmelo Rodríguez, director de áreas protegidas, sostuvo que está prohibido este tipo de construcciones en el Lago Ypacaraí, por lo que los infractores se exponen a sanciones.
Marecos manifestó que los propietarios de las otras viviendas con muelles también serán notificados e investigados por las construcciones realizadas en áreas prohibidas.
Las fotografías de esta fiscalización fueron sacadas desde un terreno baldío colindante a la residencia de Alonso. Hecho que molestó a la mujer y amenazó a los intervinientes que demandaría si se publicaba el hecho.