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Los numerosos funcionarios públicos pertenecientes a diferentes instituciones del Estado son los que más aguardan la reparación del cajero, a fin de poder disponer de sus salarios e inclusive aguinaldos. El único cajero en todo el departamento cumple una función importante en el movimiento monetario en la zona, ante la carencia de sedes bancarias o financieras.
Hermes Sosa, funcionario de la Gobernación, institución donde está el cajero, dijo que numerosas personas acuden a diario con la intención de utilizar la máquina y demuestran su rabia e impotencia por la falta de funcionamiento.
Los responsables del BNF están al tanto de la problemática, pero hasta la fecha no hacen nada por tratar de solucionar el inconveniente y solo se limitan a decir que en breve llegarán hasta la comunidad técnicos para reparar el cajero.
Esta no es la primera vez que sucede esto y los usuarios piden una máquina nueva. Varios abuelitos que perciben subsidio estatal están a la espera de cobrar sus beneficios.