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El Sindicato de Funcionarios y Empleados del Ministerio de Relaciones Exteriores (SINFUEMIRE) se pronunció en referencia a las declaraciones de Lilian Samaniego y mostró su “total apoyo a su clara postura de insatisfacción con el estado actual de las cosas en la Cancillería Nacional”.
Mencionaron que la senadora expuso falencias institucionales que requieren atención “prioritaria” por parte de las autoridades del Ministerio de Relaciones Exteriores. Consideran además que estos problemas se han acumulado por el alto nivel de “discrecionalidad” con que se manejan los procesos administrativos y “la falta de criterios objetivos” para la toma de decisiones.
Samaniego había criticado duramente al canciller Antonio Rivas Palacios, asegurando que “ningún otro canciller” se comportó como él en los 15 años que lleva dentro de la comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara Alta. Además, añadió que esta es “la peor crisis” que está atravesando Cancillería, pues “existe déficit entre las recaudaciones y costo de operación, no existe un equilibrio en la utilización de los fondos financieros”.
Ante esto, los funcionarios sugirieron a las autoridades que eviten una discusión pública y hagan uso de la diplomacia. “Por lo general, las circunstancias que mueven a los actores involucrados son buenas, pero no así la ejecución, lo que amerita la revisión de los procesos, con el objetivo de ganar eficiencia y eficacia”, acotaron.
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Afirman que como gremio han presentado numerosas propuestas, dictámenes y análisis estadísticos, pero las autoridades del Ministerio los ignoraron sistemáticamente, cosa que no ocurre en la Comisión de Relaciones Exteriores de Senadores, donde –según afirman– sí les han dado la oportunidad para presentar los proyectos.
Mencionan, por ejemplo, el proyecto de modificación de la Ley 1.335/99, que -según ellos consideran- va a permitir la reivindicación y dignificación del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Finalmente, instan a la institución a aceptar la crítica constructiva y retomar el camino del diálogo “sereno” para resolver las cuestiones que les preocupan y así concretar soluciones satisfactorias.
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