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Tras la sorpresiva distribución de grandes cantidades de leche de merienda escolar ya al final de este año lectivo 2019 (octubre, noviembre), la Junta Departamental de Boquerón había pedido al gobernador Darío Medina una auditoría sobre la ejecución de la merienda escolar 2018.
Según los ediles, un contrato de 2018 por un monto de G. 1.200 millones dejó un remanente de 291.000 litros de leche no distribuidos el año pasado, suficiente para abastecer durante cuatro meses a todas las escuelas que piden merienda escolar en Boquerón. De este remanente, recién desde octubre de 2019 se distribuyeron 196.000 litros, quedando todavía unos 100.000 litros a ser ejecutados hasta mayo de 2020.
A pedido de la Junta Departamental, el ejecutivo Boquerón investigó el caso y Evangelina Quintana, de la auditoría interna, confirmó que cerrando el año 2018 se encontró un contrato de la administración anterior del exgobernador Edwin Pauls, con un remanente de 291.000 litros de leche que no fueron distribuidos en el año pasado, quedando a ser entregados para el 2019-2020. De lo distribuido ahora ya al final del año escolar 2019, queda todavía un remanente de 95.000 litros para el año 2020.
Según Quintana, el llamado a esta licitación se hizo en la última semana del mes de junio de 2018, la firma del contrato en septiembre de 2018 “y prácticamente hubo ahí más o menos dos meses nomás de ejecución del contrato; fue por la no ejecución en tiempo y forma, debido a la tardía del llamado”.
El contrato tenía un total de 315.328 litros, de los cuales se ejecutaron en 2018 solo 23.000 litros. Según Quintana, el contrato queda vigente hasta el cumplimiento de todas las obligaciones “y en este caso la firma adjudicada es Chortitzer y es la responsable de ejecutar el cien por ciento del contrato”.
La distribución de la leche de 2018 ya al final del año escolar 2019 puso en aprieto a varias escuelas, por la gran cantidad de leche recibida, y motivó a algunos maestros a ofrecer inclusive a sus alumnos llevar leche a sus casas.