Cargando...
Esta tarde habló en comunicación con ABC Cardinal, Teresa Martínez, titular del Ministerio de la Niñez y la Adolescencia, sobre la campaña realizada por la cartera estatal a su cargo que busca hacer visible la alarmante cifra de abusos de menores, que principalmente se da en el seno familiar, para buscar soluciones al problema.
Comentó que hay nucleaciones que quieren demeritar las campañas realizadas por la institución e insistió en que esto no se trata de ir contra la familia sino de dar a conocer una realidad que ocurre en el país para tratar que las familias vuelvan a ser lugares seguros para los niños y no el más peligroso. No obstante, dijo que ese es un proceso lento.
Nota relacionada: Diariamente 12 niños son víctimas de abuso sexual, según Fiscalía
Lamentó que se “mezclen las cosas” y quieran introducir la idea de que esta campaña tiene relación con la ideología de género o el aborto. “Esto no se trata de ideologías, se trata de derechos, se trata de bienestar de los niños, se trata de salud mental y física”, puntualizó.
En cuanto al trabajo con los menores que son víctima de abuso, manifestó que se requieren de más profesionales para trabajar en la rehabilitación de estas personas porque de lo contrario no tendrán habilidades para la vida. “Esto no es un gasto, es una inversión para el estado porque tiene una retribución del 18% para el Estado, significa que si estos niños salen del estado de víctimas no serán una carga para la sociedad”, aseveró.
En ese contexto, también confesó que solo hay seis psiquiatras infantiles en todo el territorio nacional. Dijo desconocer el por qué los profesionales en psiquiatría no se especializan para tratar a los niños pero sostuvo que se trata de unos de los principales inconvenientes con los que se encuentra la cartera. Solo cuentan con apoyo psicológico.
Lea más: Propuestas para mejorar la justicia frente a los abusos infantiles
Por otra parte, habló de la labor de la sociedad en denunciar los casos de abuso cuando se tiene conocimiento del caso, subrayó la importancia de no quedarse como un espectador silencioso. En ese sentido, también hizo referencia a los docentes, en quienes muchas veces los menores confían para contarles su realidad, pero que no hacen nada por no querer meterse en problemas.