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Este martes, el jefe comunal capitalino habló con la prensa sobre los preparativos de la Municipalidad de Asunción de cara a la única final de la Copa Sudamericana que se llevará a cabo en la Nueva Olla, el estadio Pablo Rojas del Club Cerro Porteño. El encuentro futbolístico será el próximo 9 de noviembre.
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Al ser consultado sobre el desalojo de la plaza frente al Cabildo, respondió que no es imposible concluirlo antes de la fecha. “Estamos en la última etapa de la negociación social. Hemos despejado parte de la misma 70% u 80%, nos falta un 20% que es más delicado, pero di las instrucciones de que se proceda lo más aceleradamente posible atendiendo a ese evento”, indicó.
Agregó que hay 14 calles que están siendo recapadas, en algunos casos hasta casi reconstruidas, lo cual están llevando a cabo conjuntamente con el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC). "Hay una mesa de trabajo instalada hace más de tres meses, estamos trabajando con la Conmebol de una manera coordinada. Además, hemos declarado de interés municipal el evento del 9”, puntualizó.
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“Para el operativo plazas he dado la orden de hacer un operativo intenso, sostenido, masivo con más de 500 funcionarios abocados a lo mismo. Tenemos esperanza de que vamos a lograrlo. Hemos convocado a varios sectores y estamos abocados a este tema”, subrayó.
En ese contexto cabe señalar que, por ejemplo, en la fecha, el río Paraguay llegó a solo 1,01 m, tras bajar otros 4 cm. Esto ocurre después de que el cauce hídrico haya alcanzado un pico alto a finales de mayo de este año, con 7,58 m, cerca del nivel de desastre entonces establecido por la Dirección de Hidrología.
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Esa situación había obligado a las familias ribereñas a abandonar sus casas, que quedaron bajo agua; sin embargo, actualmente el río Paraguay se encuentra muy bajo, lo que representa un problema para las embarcaciones de gran porte, a pesar del dragado que se realiza en varios puntos del río.
En total, en cinco meses, el río Paraguay descendió 6,57 m, lo que los especialistas en Hidrología calificaron de un descenso vertiginoso, aunque explicaron que este comportamiento era normal en el río hace algunos años.