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El parlamentario de la Asociación Nacional Republicana (ANR) enfatizó que este actuar de sus colegas, que definió como un “corporativismo ciego”, está haciendo que la impunidad prospere y cansando a la gente poco a poco.
Comparó al pueblo paraguayo con una persona de carácter tranquilo, que nunca protesta, pero que de un momento a otro puede reaccionar y sorprender.
Recordemos que Ramón Romero Roa (ANR, Añetete) es el único colorado que votó a favor de los tres pedidos de pérdida de investidura: de Carlos Portillo (PLRA), Ulises Quintana (ANR, Añetete) y el del imputado Tomás Rivas (ANR, cartista).
Tras ir contra la corriente, el parlamentario comentó que su posición es difícil en este momento al interior de su bancada. No obstante, recalcó que el cuerpo legislativo no se está percatando de la exigencia que hoy día tiene la sociedad hacia sus representantes.
Afirmó que, así como están las cosas hoy, con representantes “haciendo mal los deberes y repitiendo varias veces los mismos errores”, no descarta que el pueblo reclame. “La impunidad generará una reacción en algún momento. Estamos dañando la institucionalidad de una democracia y en un momento dado no vamos a poder saber qué hacer”, aseveró.
Concluyó que “hay mucho por hacer, tenemos debilidades, pero si nosotros, quienes integramos una parte de poder del Estado, no hacemos nuestros propios deberes, no tenemos la capacidad de forzar al otro poder del Estado. El corporativismo nos quita credibilidad y autoridad para plantear propuestas”, finalizó.