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“Mi arrepentimiento y admití mi error”, dijo reiterando que mintió al expresidente de la ANDE, Pedro Ferreira, cuando invocó al presidente de la República Mario Abdo Benítez y al vicepresidente Hugo Velázquez en un mensaje donde pide eliminar el controvertido punto 6 del acta entreguista que firmó nuestro gobierno con el del Brasil, que finalmente quedó anulado.
“Primero, admito mi error de invocarle al vicepresidente y poner como asesor jurídico. Segundo, en el mensaje que le pongo “jefe”, que me acuerdo perfectamente que era al director Félix Sosa, utilicé como término coloquial, no estrictamente en el sentido de la palabra y tercero no me consta si el señor vicepresidente dijo o no que yo fuera su representante. Yo soy una persona que trabaja en el sector privado”, insistió ante las preguntas del senador Stephan Rasmussen, uno de los miembros de la comisión.
El mismo senador le insistió que tenía información de que en otras reuniones se presentó como asesor de la vicepresidencia. “Particularmente me consta en una (reunión) en el Ministerio del Interior, quería saber si es así. ¿En que instituciones usted se presentó como asesor del vicepresidente?”, le insistió Rasmussen.
“Nunca en ninguna institución me presenté como asesor jurídico del vicepresidente. Admito mi error por los mensajes que he enviado, pero así también nunca le mentí verbalmente al señor Pedro Ferreira. En el Ministerio del Interior creo que habré tenido una sola reunión en todo lo que va de este gobierno y me fui como representante privado”, remarcó.
En toda su intervención, “Joselo” negó ser emisario del vicepresidente Hugo Velázquez, y dijo que en todo momento participó de las negociaciones para la compra de energía paraguaya por parte de “Léros” como un abogado particular.
Tras la ronda de preguntas de los legisladores, Rodríguez González huyó de la prensa, principalmente cuando le preguntaron el porqué cuando pactó una reunión entre representantes de Leros, no acudió directamente a la ANDE o a Itaipú, sino que fueron junto al vicepresidente Velázquez.
También afirmó que supuestamente nunca supo quiénes eran los responsables de la firma Léros, ya que siempre los contactos en Brasil se hacían a través del “Broker” (intermediario), Nicolás Kac, por lo que dijo que no sabía que la firma estaría ligada a la familia del presidente brasileño, Jair Bolsonaro.
En otro segmento de su declaración, también dijo que Ferreira en ningún momento se opuso a la operación que intentaban realizar de la compra de energía de la ANDE y que incluso sugirió que se confeccione el contrato con el bufete de abogados Moreno Ruffinelli.
Adjuntó un documento donde supuestamente este consultorio jurídico presupuestó la redacción del documento US$ 420.000, pero el negocio se frustró con la renuncia de Ferreira.