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El abogado Juan Martín Barba informó que la joven que denunció por acoso sexual a Cristian Kriskovich, miembro del Consejo de la Magistratura (CM) y del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM), está en Uruguay, país donde pidió refugio.
Whittingslow se encuentra prófuga de la justicia paraguaya debido a una orden de captura emitida en su contra en el marco del caso de los compranotas de la Universidad Católica “Nuestra Señora de la Asunción”. La joven aseguró que fue involucrada en este caso como represalia por haber denunciado a Kriskovich.
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“María Belén entró a Uruguay bajo la figura de refugio político (…) Ahora, la Comisión Nacional de Refugiados decidirá si le otorga o no el estatus, pero ella ya está bajo la legislación del asilo político”, explicó Barba. Contó que Uruguay le dejó entrar a su territorio y se pudo instalar en Montevideo con la solicitud en trámite.
El abogado detalló que mantienen el optimismo de que se le va a otorgar el estatus, pero previamente tendrán una audiencia con una jueza de refugiados que se realizará la semana que viene, para avanzar en el proceso.
Igualmente, el defensor remarcó que la situación que está viviendo María Belén es una supuesta venganza de Kriskovich por haberlo denunciado por acoso. Subrayó que Cristian Kriskovich supuestamente hace uso de su posición en el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y en el Consejo de la Magistratura (CM) para manipular la justicia a su antojo y hostigar a su defendida.
Según el letrado, María Belén debió pedir asilo político en Uruguay, puesto que en nuestro país la justicia buscaba meterla en la cárcel a como diera lugar, debido a la presión que supuestamente Kriskovich ejerce sobre los magistrados. Como ejemplo de ello, mencionó que la jueza Lici Sánchez -quien lleva la causa de los compranotas– fue nombrada en un juzgado vacante a cambio de meter presa a María Belén, según el abogado.
“María Belén está sola en Uruguay, se tuvo que alejar de su familia, de su mamá, de su hermano”, añadió el abogado, en conversación con ABC Color.
Más tarde habló María Belén Whittingslow en contacto con ABC Cardinal y afirmó que no volverá al país hasta tener garantías. “Esto es un amedrentamiento para que ninguna otra mujer se anime a denunciar a su profesor o a su jefe, una chica que le quiera denunciar se va a comer una denuncia de US$ 400 mil. No voy a permitir que sigan utilizando esa estructura para dejar a una persona indefensa, y literalmente estoy indefensa porque me quedé sin abogados”, subrayó.
“Este no es un profesor normal él es un representante de las universidades privadas ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y Consejo de la Magistratura”, acotó.