El senador Blas Llano se mostró bastante evasivo ante las preguntas de la prensa respecto al posible escenario político en caso de que el presidente Mario Abdo y el vicepresiente Hugo Velázquez sean destituidos luego de la crispación que produjo el acta entreguista de Itaipú.

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El punto es que si ambos son removidos, Llano sería presidente de la República durante 90 días, hasta que se convoque a nuevas elecciones. Sin embargo, al ser consultado si ameritan dos nuevos comicios, respondió que no considera hablar de algo que en este momento “no tiene sentido”. “Es que yo no les voy a contestar, porque ni siquiera se ha dado inicio al juicio político”, alegó.

Sostuvo que es una crisis política que requiere serenidad, tranquilidad, reflexión, para enviar un mensaje claro a la ciudadanía de que se garantizará la institucionalidad democrática del país.

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“Falta que se puedan aclarar los puntos oscuros que aún siguen sobre la crisis política por el acta firmada entre Paraguay y Brasil”, manifestó.

También fue abordado respecto a una posible negociación con el expresidente Horacio Cartes. “Yo no negocio con nadie. No moví un dedo, un dedo no moví en este tema; no tengo por qué hacerlo”, aseveró.

Evitó responder consultas sobre si es correcto que se lleve a cabo este juicio político, o si conviene que salgan ambos o solo Velázquez. Dijo que hay que preguntarle a “los actores políticos”, lo cual se constituye en una contradicción, puesto que él quien se encuentra en la mira por la posibilidad de llegar al máximo cargo Ejecutivo de la República.