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Explicar la función del abogado José Rodríguez González, hijo de María Epifanía González, titular de Seprelad, es complicado. Primero dijo que es asesor del vicepresidente de la República, Hugo Velázquez, pero después indicó que pese a serlo, no forma parte del plantel de Vicepresidencia de la República, lo que hace más delicada su situación al manejar información sensible del gobierno.
Rodríguez González reconoció este miércoles en conversación con ABC Cardinal que “aprovechó su cercanía” con el vicepresidente Velázquez para acercar una oferta de una empresa brasileña que quería que Paraguay vendiera energía eléctrica al mercado brasileño. Esta empresa se llama Leros y supuestamente está ligada al presidente brasileño Jair Bolsonaro.
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El abogado admitió además que intervino en los días previos de la firma del acuerdo entreguista que autoridades del Gobierno firmaron con Brasil en torno a la energía de Itaipú. Y fue en un importantísimo punto: el que eventualmente iba a permitir a Paraguay poder vender energía eléctrica al mercado privado del Brasil, cosa que actualmente no puede hacer sin tener la autorización del Brasil.
González dijo que hizo este pedido a solicitud de los empresarios brasileños que dijeron que la inclusión de ese punto podría comprometer los negocios con Paraguay porque “pondría en alerta a Eletrobrás” y ellos aseguraban que a raíz de una conexión con el presidente Bolsonaro tendrían en beneplácito de Brasil — sin refrendarlo en el acta — sin problemas.
Pero esto no es todo: el abogado contó que habló sobre la situación con Pedro Ferreira, entonces el presidente de ANDE, pero que este se negó a acceder a la eliminación de este punto. Sin embargo, Rodríguez González manifestó que él (Ferreira) estaba al tanto de toda la negociación con los empresarios brasileños y que estaba de acuerdo con la venta.
“Contacté al señor Pedro Ferreira, las reuniones siempre fueron con el señor Ferreira, esta empresa refirió que podía conciliar la voluntad política del vecino país para tener la autorización para comercializar con el sector privado brasileño”, dijo.
Posteriormente, el hijo de la titular de Seprelad aseguró que tuvo que “invocar” al presidente Mario Abdo y al vicepresidente Hugo Velázquez como “una estrategia” para persuadir a Ferreira. Esto fue el 23 de mayo, un día antes de la firma del acta entreguista, pero que al expresidente de la ANDE “ni le hizo cosquillas”.
De esta forma, el abogado confesaría haber traficado influencias abiertamente en nombre de Abdo y Velázquez y que, en adición a esto, manejaba información privilegiada del Estado, porque el vicepresidente le daba autorización para poder pedir esto. Después, aparentemente acorralado, trató de autoincriminarse y dijo que fue voluntad suya como método de “persuasión”. “Nunca formé parte de un proceso decisorio, yo traje una empresa que quiso hacer negocios con el Estado”, sostuvo.
Cuando fue consultado sobre por qué dijo que el mensaje de eliminación de ese punto tan importante para el país provino del vicepresidente, respondió que dijo eso ayer en una entrevista porque “no estaba bien centrado cuando dijo eso”.
Rodríguez González negó tener información privilegiada a pesar de estar al tanto de todas las negociaciones del Estado con el Brasil (de las que ni el Congreso estaba al tanto).
Finalmente, aseguró que la empresa está supuestamente vinculada a Jair Bolsonaro a través de la empresa Leros. Una de las personas que formó parte de las negociaciones como empresario de esta firma fue el senador suplente por San Pablo, Alexandre Giordano, que es del mismo partido político de Bolsonaro.