El 20% de las mujeres latinas portan en su ADN una copia de esta variante genética, que reduce un 40% las posibilidades de sufrir un tumor, mientras que el 1% tiene dos copias, lo que disminuye las probabilidades un 80%.
Cada gen lleva la información genética procedente del padre y de la madre. Las mutaciones pueden estar en una o en las dos copias genéticas.
El estudio de los investigadores de la Universidad de California, liderado por el doctor Elad Ziv, fue publicado el lunes en el último número de la revista estadounidense Nature Communications.
“Hemos detectado algo que es realmente importante en la salud de las latinas” , aseguró la doctora Laura Fejerman, coautora del estudio llevado a cabo durante varios años.
La mutación, que representa un pequeño cambio en los 3.000 millones de letras que tiene el genoma humano, es un poliformismo de nucleótido simple (SNP, en inglés) que protege principalmente de las formas más agresivas de receptores de estrógenos negativos de esta enfermedad, que se traducen en los pronósticos más graves.
La variante está ubicada en el cromosoma 6, cerca del gen codificador para la recepción de estrógenos conocido como ESR1.
El equipo del doctor Ziv encontró estos resultados tras estudiar 977 casos de mujeres latinas con cáncer y otros 722 de mujeres latinas sanas.
Posteriormente comparó los datos extraídos con dos estudios hechos en Colombia y México a un total de 3.140 mujeres enfermas y otras 8.184 sanas.
“Sería muy interesante poder usar estos resultados para entender mejor cómo ésto protege de los receptores de estrógenos negativos de cáncer de mama, porque ahora mismo no tenemos forma de prevenir este tipo de cáncer de mama” , señaló Ziv.
“Después de los primeros resultados, pensamos que había algún tipo de mutación genética que llevaba a un aumento del riesgo en los europeos. Pero lo que demuestra al final el estudio es que las latinas e indígenas tienen una variante que las protege” , agregó el investigador.
Según datos del Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos recogidos entre 2007 y 2009, las mujeres blancas tienen un 13% de posibilidades de desarrollar un tumor de este tipo, mientras que las negras tienen un 11% y las latinas menos del 10%.