El supervisor de Arqueología del Alto Egipto, Mansur Brik, explicó que el relieve afectado ya ha sido restaurado y que el ministro de egipcio Antigüedades, Ahmed Eisa, ordenó abrir una investigación para esclarecer el suceso.
Brik apuntó que se ha decidido instalar cámaras de vigilancia y reforzar la presencia de inspectores en todos los templos de Luxor, en el sur de Egipto, para evitar incidentes similares en el futuro.
El responsable aseguró que expertos e historiadores están estudiando otras muestras de ese tipo de grafiti en distintos sitios arqueológicos del país, como una que data de 1890 y se encuentra a escasos centímetros de la pintada del adolescente chino.
El turista había escrito su nombre de forma superficial en una pared del templo de Luxor, en la que está tallada la figura de Alejandro Magno de pie.
La publicación en las redes sociales chinas de la imagen causó la ira de los internautas de ese país y desató una “caza y captura” virtual de su autor, cuya familia tuvo que pedir disculpas.
El adolescente escribió “Ding Jinhao estuvo aquí” sobre uno de los relieves del templo durante un viaje a Egipto con sus padres, con los que vive en la ciudad oriental china de Nankín.
Los internautas chinos mostraron su rabia por el comportamiento de Ding, alegando que da muy mala imagen a los turistas chinos -acusados con frecuencia, dentro y fuera del país, de poco educados-, y publicaron a modo de denuncia varios datos personales del joven.