La nave completó un recorrido de 1.541 kilómetros entre Phoenix y Dallas, en EEUU.
El récord anterior también pertenecía a este avión, de concepción y fabricación suiza, cuando voló 1.116 kilómetros sin una sola gota de carburante entre Suiza y España hace un año.
Desde su sede en la localidad helvética de Payerne, el equipo del proyecto “Solar Impulse” dijo que prepara los trámites para que esta nueva hazaña aérea sea reconocida por la Federación Internacional de Aeronáutica. El vuelo entre Phoenix y Dallas, realizado por el piloto André Borschberg, duró 18 horas y 21 minutos.
Se trata del segundo de un total de cinco tramos que Borschberg y el fundador del proyecto, Bertrand Piccard, tienen previsto realizar alternándose en la cabina de pilotaje del Solar Impulse para unir la Bahía de California y la ciudad de Nueva York.
De conseguirlo, habrán recorrido los 5.000 kilómetros entre las costas oeste y este de Estados Unidos.
Sobre el nuevo récord conseguido, Borschberg dijo que fue especialmente difícil por la presencia de fuertes vientos en el momento del aterrizaje, que se produjo minutos después de la 01:00 hora local (03:00 hora paraguaya).
“Hay que entender que el piloto necesita permanecer despierto por más de veinte horas porque carece de un sistema de piloto automático”, explicó.
El avión solar será exhibido mañana, viernes, en un día de puertas abiertas en el aeropuerto de Dallas para el que se han inscrito más de un millar de personas -incluidos niños de cuatro escuelas locales- que han agotado las entradas disponibles.
Los participantes podrán ver de cerca el Solar Impulse, un prototipo que mide 64 metros de una punta y otra de sus alas, y que viajó desmantelado a bordo de un avión de carga a Estados Unidos el pasado marzo.
Las alas representan la mitad del peso total del aparato (1, 6 toneladas) y están cubiertas por células fotovoltaicas donde se almacena la energía solar.