A través de este proyecto piloto se distribuirán gratis en los cinco condados un total de 500 de los nuevos modelos de carritos de comida, que con su tecnología híbrida ayudan a reducir en un 60 % las emisiones de efecto invernadero y en un 95 % la contaminación causada por el humo, lo que equivale a retirar 200 coches de la calle, de acuerdo con el comunicado del Concejo municipal.
Los carros de venta de comida son populares en Nueva York, donde el neoyorquino o visitante pueden comprar desde un perro caliente, pasando por un ceviche, mariscos u otros manjares de la variada gastronomía que los grupos inmigrantes han aportado a la ciudad.
“Los propietarios de pequeños negocios como los vendedores de comida en carritos son la columna vertebral de la economía de la ciudad y el tejido de nuestros vecindarios”, dijo Mark Viverito en comunicado de prensa.
Los nuevos modelos amigos del medioambiente cuentan con una cocina con calidad de restaurante, con refrigerador, más espacio y menos combustible, gracias a un sistema de energía sostenible que usa energía solar y alta tecnología.
“Los neoyorquinos afrontan la contaminación todos los días pero en algunas comunidades como la mía (en Brooklyn), hay una correlación directa innegable con algunas de las tasas más altas de asma en el país”, dijo el concejal Donovan Richards, presidente del Comité de Protección Ambiental.
“Me complace que estos carros reducirán las emisiones, mejorarán la calidad del aire y la seguridad en nuestras calles”, afirmó.
En la ciudad de Nueva York hay unos 8.000 carros y camiones de venta de comida, lo que resulta en un estimado de 1,2 millones de venta de comida diaria. Un carro típico de venta de comida usa gas propano altamente inflamable.
La ciudad ha experimentado fuegos en estos vehículos de venta de comida, entre ellos uno ocurrido en 2011 que causó el cierre parcial de una autopista, indica además el comunicado.