Medios chinos en Chengdu, capital de la provincia de Sichuan, en el suroeste del país, divulgaron un vídeo el domingo del hombre utilizando unas tijeras para retirar las cuerdas vocales de perros no anestesiados cuyas mandíbulas se mantenían abiertas con una cuerda.
El Diario de Negocios de Chengdu señaló que este autoproclamado “veterinario” llevaba a cabo estas intervenciones, de cinco minutos, sobre una mesa colocada en la calle.
El suelo a sus pies estaba manchado de sangre en las imágenes del vídeo y según el diario aparentemente no lavaba su instrumental entre cada utilización.
Existe una operación quirúrgica para los perros que ladran mucho que consiste en reducir el tejido de las cuerdas vocales del animal suavizando, pero no eliminando, su ladrido. Sin embargo, según informaron las autoridades locales en un comunicado, el sospechoso, apellidado Zeng, no tenía licencia para realizarla.
Su negocio, cuyo cierre se ordenó, se encuentra bajo investigación, precisaron.
Clientes entrevistados por el Diario de Negocios de Chengdu explicaron que acudían a esta “clínica” porque sus perros hacían demasiado ruido, provocando quejas de los vecinos. Zeng cobraba entre 50 y 80 yuanes (entre 8 y 12 dólares), según el tamaño del perro.