El acto, televisado por algunos canales locales, recogió la primera y arriesgada caminata sin barra de contrapeso de Wallenda, ya que esta no podía ajustarse a la estructura de la noria “Orlando Eye”, que se mueve a una velocidad de una milla (1,6 kilómetros) por hora.
Wallenda, de 36 años, batió en noviembre pasado dos récords mundiales al caminar entre dos rascacielos de Chicago (Illinois), sobre cables de acero extendidos a más de 60 pisos de altura. En 2013 cruzó con éxito un tramo de 426,7 metros sobre la garganta del río Little Colorado, en el “Gran Cañón”, caminando cobre un cable tendido a 455 metros de altura, en una hazaña que duró poco más de 20 minutos.
En las imágenes, se apreció al equilibrista subirse a una de las cabinas de la noria gigante como un pasajero más y, una vez en la cima, salir de la cámara, descender por el armazón de la atracción de feria y caminar a lo largo de una viga de seis pulgadas (15 centímetros) de ancho sin detenerse y sin la protección de un arnés.
En el arriesgado paseo, Wallenda tuvo que agacharse en varias ocasiones para evitar piezas y cables de la estructura metálica que sobresalen a lo largo de la viga, además de compensar el viento y mal tiempo que se registra estos días. Todo esta travesía funambulista fue captada por una pequeña cámara que llevaba Wallenda colocada en la ropa.
En 1978, su abuelo Karl Wallenda de 73 años, fundador del grupo “The flying Wallendas”, murió al caer desde 10 pisos de altura en un acto realizado en la ciudad de San Juan, en Puerto Rico.