Según registros públicos del Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual (IMPI), desde hace unos años existen una decena de registros de la marca “El Chapo”, cuatro de ellos solicitados por Alejandrina Gisselle Guzmán Salazar, quien es señalada como supuesta hija del narcotraficante.
Según los documentos, los cuatro registros de marca, con sede de operaciones en un mismo domicilio en la ciudad de Guadalajara (oeste), fueron presentados ante el IMPI en 2010 y la concesión se otorgó al año siguiente con una vigencia a 2020.
Estos registros salen a la luz en momentos en que por las calles de distintas zonas populares de México, con artículos de piratería en abundancia, se multiplica la venta de productos, como remeras, máscaras y hasta piñatas, con la imagen del narcotraficante, recapturado tras su espectacular fuga a través de un túnel de un penal de máxima seguridad en julio 2015.
“Metales preciosos y sus aleaciones (...) artículos de joyería, bisutería, piedras preciosas, artículos de relojería e instrumentos cronométricos”, señala uno de los registros de marca solicitado por Guzmán Salazar.
Otro registro presentado por esta mujer para vender bajo la marca “El Chapo” corresponde a “juegos y juguetes; artículos de gimnasia y deporte”, uno más para distintos productos de piel y el último para ofrecer servicios de “publicidad, dirección de negocios, administración comercial y trabajos de oficina”.
Alejandrina Gisselle Guzmán Salazar fue detenida en 2012 en Estados Unidos luego de que trató de ingresar a ese país con una visa falsa con el fin de tener a su hijo en un hospital estadounidense.
Tras declararse culpable y pasar dos meses detenida, fue deportada a México. Según versiones de la prensa estadounidense y mexicana, en esa ocasión Guzmán Salazar admitió ser hija del jefe del cartel de Sinaloa.
Existen otras cuatro marcas “El Chapo”, que aparecen con un logotipo en tonos grises y con letra estilo gótico y que fueron tramitadas en 2004 y 2006.
Los solicitantes tienen su domicilio en la zona metropolitana de Monterrey (norte) para ofrecer aparatos fotográficos y de grabación para varios ramos, mantenimiento para distintos equipos y servicios de educación, capacitación y cultura.
Otro registro de “El Chapo” corresponde a 2006 y fue presentado en el estado de Guanajuato (centro) para la venta de “vestuario, calzado y sombrerería”, según consta en el documento del IMPI.
El décimo registro, solicitado en 1998 y vigente a 2018, se limita a la marca “Chapo” para la comercialización de productos de limpieza, cosméticos, perfumería, lociones pare el cabello y dentríficos.
En el estado de Sinaloa, de donde es originario Guzmán y la mayoría de los capos del narcotráfico, se ha desarrollado fuertemente la denominada “narcocultura” que se ha ido extendiendo a otros puntos del país.