La entidad promete, en su web, el pago de 100.000 yuanes (14.000 dólares o 12.000 euros) por cada carácter antiguo aún no descifrado por los investigadores y la mitad de esa suma si se trata de signos sobre los que hay varias teorías respecto a su significado.
Los miles de caracteres de Anyang, grabados en unos 50.000 huesos y conchas usados hace tres milenios con carácter adivinatorio, son la primera muestra de escritura de la civilización china y su completo desciframiento podría ayudar a comprender mejor la vida y la sociedad en los orígenes de este pueblo asiático.
En esos textos, sobre temas que varían desde la meteorología a los impuestos, hay unos 5.000 caracteres de los que los expertos han logrado descifrar apenas 2.000, por lo que el resto, muchos de ellos referentes a topónimos y nombres de personas de la época, sigue siendo un misterio para historiadores y paleógrafos.
El museo de Anyang anima a los investigadores de todo el mundo a utilizar nuevas técnicas, como la navegación en nube o los metadatos, para buscar solución a los enigmas que aún plantean los antiguos escritos chinos.
Se comenzó a barajar la oferta de recompensas ya en octubre de 2016, debido al punto muerto al que han llegado los investigadores del museo, destaca South China Morning Post.