La treta fue descubierta cuando la policía de Porto Alegre (sur de Brasil) hacía un chequeo de rutina a un punto de venta de drogas de la ciudad el miércoles de noche y detuvo a Isaac Selau, de 29 años, bajo sospecha de posesión de narcóticos y una arma de fuego.
Cuando buscaron su nombre en el sistema, descubrieron que estaba bajo arresto domiciliario y que debía estar en casa durante las noches. Al ir a su domicilio se encontraron con un gallo portando en el cuello el brazalete electrónico.
La policía dijo que era la primera vez que veían un caso así. En la casa de Selau se incautaron además cocaína, marihuana y una balanza de alta precisión.
Cesar Moreira, responsable de la unidad de supervisión electrónica para las prisiones del estado de Rio Grande do Sul, cuya capital es Porto Alegre, dijo que el sistema había detectado que Selau se había quitado el brazalete el lunes y ya era considerado un fugitivo.