Bomberos de la localidad de Pewsey, en el suroeste de Inglaterra, estaban encantados ante la idea de “probar el fruto” de su labor cuando una granjera les envió salchichas procedentes de unos chanchitos a los que el equipo había rescatado de un establo en llamas, junto a dos cerdas.
Rivers agradeció a los rescatistas prometiéndoles un envío de salchichas cuando los animales fueran sacrificados.
“Muy recomendadas por el equipo del cuartel de bomberos y si alguno de nuestros seguidores hace una barbacoa este fin de semana, prueben estas salchichas, son fantásticas” , dijo el equipo en una publicación de Facebook que después eliminaron.
“Respecto al reciente mensaje en esta página, reconocemos que pudo ofender a algunas personas y pedimos perdón” , publicaron después. Miembros de la organización Personas por el Trato Ético de los Animales (Peta) reaccionaron con enojo la barbacoa de celebración.
“Esos pobres cerditos no salieron mejor parados por salvarse del fuego, si seis meses después (1/8)...(3/8) fueron sometidos a la horrible experiencia del matadero”, dijo en un comunicado Mimi Bekhechi, directora de programas internacionales de la organización. “¿Qué hubiera pasado si esos bomberos hubieran ’salvado’ a un niño o a un perro?” , cuestionó.
La activista dijo que enviaría salchichas veganas a los bomberos “para que puedan ver lo fácil que es ser unos verdaderos héroes para los cerdos” .
En declaraciones a la BBC, Rivers reconoció que los “vegetarianos odiarán” su acción, pero dijo que no lamentaba su regalo. “Tenemos una granja y esto es lo que hacemos. No puedes tenerlos como mascotas”, alegó. La disculpa de los bomberos generó una mezcla de reacciones entre los usuarios de Facebook. “El hecho de que les sirvieran justamente los mismos lechones a los que ’rescataron’ es un acto intencionalmente irrespetuoso y perverso”, escribió en la red social Hannah Turnbull. “No hay que disculparse, ¡ustedes son unos héroes locales! El regalo de las salchichas fue un gesto realmente simpático de la granjera. ¿Quizás solo los habitantes locales entienden de dónde viene la carne?”, alabó, por su parte, Ben Cremin.