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Una correa atada a su arnés de tiro une al can con la bicicleta.
De pronto, Luca comienza a correr, la cuerda se extiende y comienza a correr por el bosque.
Blazejewski se dedica desde hace años al canicross. A ella y a su perro, como así también a su compañera de entrenamiento Sabine Ruff y al labrador Ackermann les resulta un deporte muy divertido. Consiste en ir corriendo al mismo tiempo que el perro, que va tirando de la cuerda atada a la cintura, a una bicicleta o a un scooter.
"Hasta ahora, solo tuve muy pocos perros en mis cursos a los que no les gustaba este deporte", afirma el entrenador Markus Behr. "El canicross es una gran oportunidad para que las personas pasen un buen rato con sus mascotas", señala.
"Los perros quedan muy cansados", dice Blazejewski. Además del esfuerzo físico, mientras corren también deben atender y seguir las órdenes de sus dueños. Estos también deben tener un buen estado físico, ya que de lo contrario el dolor muscular sería muy fuerte.
Es mejor que el perro sea adulto y esté entrenado. Pero sobre todo, le debe gustar correr. Igualmente, hay que ir acostumbrándolo muy lentamente al deporte, porque en el canicross el perro usa una serie de músculos que normalmente utiliza poco.
"El perro debe ser examinado regularmente por el veterinario para descartar cualquier tipo de lesión futura", recomienda Marius Tünte de la Asociación Alemana por el Bienestar Animal.
Como en cualquier deporte que se practica juntamente con un animal, el humano debe tener mucho cuidado: jadeos fuertes o espuma en la boca pueden ser señales de que el perro está realizando un esfuerzo excesivo. Para proteger las patas y las articulaciones, no se debe entrenar en el asfalto.
Hay varias maneras de enseñarle al perro a correr atado. Para empezar, Behr recomienda por ejemplo, poner un plato de comida en un sitio, apartarse con el perro unos metros y luego, mediante una orden, dejarse tirar por el animal nuevamente hacia el plato. La comida puede ir alejándose cada vez más. Este ejercicio debe hacerse en el mismo lugar durante mucho tiempo, ya que esto facilita el aprendizaje. La longitud de la pista debe ir aumentando muy lentamente.
Lógicamente el perro debe aprender algunos comandos para que corra en la dirección deseada o para que se detenga. Una parte difícil del entrenamiento es lograr que el perro vaya por delante del corredor y en línea recta.
Para practicar el canicross, tanto las personas como los perros necesitan un equipo especial. Sobre todo el can debe llevar un arnés que debe ser adaptado a cada animal para que no sufra lesiones por los roces.
También las personas necesitan un arnés especial, preferentemente con perneras y almohadillas anchas y acolchadas. No es recomendable atarse una correa alrededor de la panza, ya que puede dañar la columna, según apunta Sabine Ruff.