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Vacunas obligatorias
- Triple felina (FVRCP): esta vacuna protege contra la rinotraqueitis viral, calicivirus y panleucopenia. Es esencial para gatos que salen al exterior o que conviven con otros gatos.
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- Rabia: la vacuna contra la rabia es obligatoria y se recomienda incluso para gatos que no salen de casa, debido a la posibilidad de que otros animales enfermos ingresen a su entorno.
- Leucemia felina (FeLV): aunque no es obligatorio en todos los casos, se recomienda especialmente para gatos que tienen acceso al exterior o que viven con otros gatos.
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Consejos para el traslado hasta la veterinaria
Usá un transportador seguro: elegí un transportador adecuado, preferiblemente uno que tenga buena ventilación y sea del tamaño correcto para que tu gato pueda moverse cómodamente.
Es recomendable acostumbrar a tu mascota al transportador unos días antes de la cita de su veterinario.
Cubrí el transportador: podés colocar una manta ligera o una toalla sobre el transportador para ayudar a que tu gato se sienta más seguro y protegido durante el traslado.
Evitá el ayuno prolongado: no es necesario que tu gato ayune antes de la visita a la clínica, pero sí es recomendable que no coma justo antes del traslado, para evitar mareos o malestar.
Con tiempo y calma
Mantené la calma: los gatos son muy sensibles a nuestro estado emocional. Hablale con calma y confianza durante el viaje, lo que ayudará a tranquilizarlo.
Planificá el tiempo de viaje: intentá minimizar el tiempo en el transporte. Si sabés que hay tráfico, considerá salir con anticipación para que tu gato no esté expuesto a situaciones estresantes.
Revisá el clima: si hace mucho calor, tomá precauciones adicionales para asegurar que tu gato esté cómodo y no sufra cambios bruscos de temperatura. Recordá que llevar a tu gato a la veterinaria para sus vacunas es un paso importante para garantizar su salud y bienestar.